El déficit público hasta octubre, 2,7 billones de pesetas, duplica al del año anterior

El déficit de caja del Estado hasta finales de octubre se ha elevado a 2,696 billones de pesetas, mientras que hace un año el desequilibrio entre ingresos y gastos del Estadoera de 1,371 billones de pesetas. El crecimiento del déficit se acerca al 97%. El ministro de Economía, Pedro Solbes, señaló que el déficit acumulado "entraba dentro de lo previsto" y se mostró cauto sobre si laeconomía española muestra ya signos de reactivación, mientras que el titular de Industria, Juan Manuel Eguiagary, dijo que existen datos para apuntar a una inflexión en la coyuntura económica.

La profundidad de la crisis económica se ha seguido manifestando en las cuentas del Estado durante el p asado mes de octubre. En periodos normales octubre es un mes en el que los ingresos del Estado superan a los gastos. En este ejercicio se ha invertido la tendencia Y, además, en proporciones muy elevadas. Así, mientras que hace un año los ingresos superaron a los gastos en más de 137.000 millones, en el ejercicio actual el Estado se gastó 70.300 millones más de lo que ingresó.El mal resultado de octubre magnifica lo que viene ocurriendo a lo largo del año y, según fuentes de Economía, los datos "no suponen novedad alguna sobre lo que habitual en los últimos meses y que es reflejo de la situación actual de la actividad económica".

El incremento del déficit público se produce, según el ministerio, por los menores ingresos obtenidos como consecuencia de la caída de la producción, el empleo y el consumo mientras que los pagos crecen por las transferencias corrientes y la cargas financieras de la deuda pública.

Las cifras de octubre, en este sentido son significativas de lo que ha ocurrido en todo el año. Los ingresos por impuestos directos caen un 8,7% respecto al mismo mes del año anterior y los derivados de los impuestos indirectos lo hacen en un 1%. La menor recaudación neta por el impuesto sobre la renta de las personas físicas en el mes de octubre (un 9,7% menos) se debe tanto a los menores activos registrados como a que en ese mes las devoluciones sobre la liquidación del impuesto efectuada en junio han ascendido a 206.000 millones de pesetas, cuando un año antes fueron de 130.000 millones.

La caída de los ingresos por la recaudación de los impuestos indirectos, del 1%, se debe a un descenso en los ingresos por IVA del 2,8% que es compensada en parte por los mayores ingresos, un 17,1% más, del impuesto especial de hidrocarburos que se elevó en agosto dentro del plan de medidas urgentes para frenar el deterioro de las cuentas públicas.

En el conjunto del año los ingresos del Estado superan ligeramente los 10 billones de pesetas, con un aumento del 1,1%, mientras que los gastos superan los 12,738 billones de pesetas, con un aumento del 12,7%. Los ingresos muestran un descenso del 2,7% en los impuestos directos y del 6% en los indirectos. Los mayores volúmenes de devoluciones por IRPF, junto a los menores ingresos por el impuesto sobre sociedades, explican la caída de los impuestos directos.

Los ingresos totales se ven salvados en parte gracias al aumento de los dividendos y participaciones en beneficios ingresados en el Tesoro por empresas y otros entes públicos. Estos ingresos han crecido un 75% y suman 1,221 billones.

El ministro de Economía dijo que el aumento del déficit se debe a las mayores devoluciones del IRPF y a los problemas de financiación que se derivan de la supresión del recurso al Banco de España (dinero que el Tesoro le pide prestado al Banco) a partir del próximo 1 de enero. Pedro Solbes descartó revisar la previsión fijada para fin de año, un 6,2% del PIB.

El ministro habló con prudencia sobre la recuperación económica, aunque esperanzado de que lo peor haya pasado. "En el tercer trimestre se observa una caída menor de la actividad y algunos elementos positivos", dijo, "pero éstos no deben llevarnos a lanzar las campanas al vuelo porque no plantean todavía una recuperación clara". Por su parte el ministro de Industria, Juan Manuel Eguiagaray, afirmó que existen datos para afirmar que la crisis está tocando fondo y que apuntan a una inflexión en la coyuntura económica.