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El abogado de la presunta etarra muerta en Madrid afirma que Corcuera mintió

"Corcuera mintió. Ya puede ir preparando los alicates y el destornillador, porque igual tiene que dimitir y volver a trabajar en Altos Hornos", afirmó ayer el abogado Kepa Landa, acusador particular en nombre de la familia de Miren Gurutze Yanci, la presunta etarra muerta el pasado 24 de septiembre en calabozos de la Guardia Civil en Tres Cantos (Madrid). La forense que atendió a Yanci y otra supuesta etarra presa en una celda contigua aportaron ayer "elementos que prueban que Corcuera mintió", dijo Landa.

Esther Lobo, juez de Instrucción de Colmenar Viejo (Madrid), interrogó a la médico del centro de salud de Tres Cantos que confirmó la muerte de Yanci; a la forense Leonor Ladrón de Guevara, que atendió a la víctima las últimas horas de su vida; y a Karmele Urbistondo Aramburu, una supuesta etarra que estaba en una celda colindante a la de la fallecida.La declaración de las tres mujeres se prolongó por espacio de casi siete horas. Al término de estas diligencias, el abogado Landa afirmó que Yanci "sufrió malos tratos y prueba de ello es que tuvo ataques epilépticos", a la vez que descartó que la muerte de la detenida se debiera a causas naturales.

"La forense y la médica de Tres Cantos y Karmele Urbistondo han aportado elementos que demuestran que la Guardia Civil y el ministro del Interior mintieron", según el letrado, que no reveló cuáles son esos elementos. "Creo que estamos cinco minutos de la respuesta la interrogante de qué fue lo que pasó a Miren Gurutze".

Congestión catarral

Landa informó de que la forense Ladrón de Guevara había reconocido a Yanci a las ocho de la tarde del día 23 de septiembre, sin apreciarle nada más que una congestión catarral, por lo que le recetó el mucolítico Mucorex. Este mismo fármaco fue el que Ladrón de Guevara recomendó a la detenida cuando a las tres de la madrugada siguiente habló telefónicamente con ella. El acusador particular, en nombre de la familia Yanci, aseguró que ésta pudo dejar de existir por un ataque epiléptico originado por la falta de aire y el estrés. "La misma forense ha declarado", agregó, "que el coágulo de sangre al que oficialmente se atribuye el fallecimiento pudo producírsele tras su muerte".Alfonso Serrano, abogado de Ladrón de Guevara, dijo que ésta no había recetado el Mucorex por teléfono, sino que lo hizo después de reconocer en persona a la detenida, "sin encontrar ninguna anomalía". "Mi clienta está tranquila porque actuó correctamente".

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