EE UU intenta recaudar 260.000 millones para la futura autonomía de los territorios palestinos

El Gobierno norteamericano pasó ayer el cepillo entre medio centenar de naciones del mundo con el fin de colectar unos 2.000 millones de dólares (260.000 millones de pesetas) con que inyectar energía monetaria al reciente acuerdo de paz entre el Gobierno de Israel y la Organización para la Liberación de Palestina (OLP). EE UU, organizador de la conferencia celebrada ayer en Washington para recaudar fondos para la futura autonomía palestina, empezó la ronda con un cheque de 500 millones de dólares, según anunció el vicepresidente Al Gore en la apertura de la reunión.

El objetivo final de esta conferencia, organizada con cierta precipitación y sin mucho brillo, es alcanzar la cantidad que el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial consideran necesaria para el autogobierno que funcionará inicialmente en la banda de Gaza y la ciudad de Jericó: entre 500 y 550 millones de dólares anuales durante los próximos diez años.Para el año de 1994 se han comprometido ya 600 millones de dólares, según anunció ayer el responsable del Tesoro de Estados Unidos, Lloyd Bentsen. Sin embargo, las previsiones de Bentsen se quedan al menos 500 millones de dólares por debajo de las necesidades previstas por el FMI.

Según los palestinos, tanto las ofertas de la comunidad internacional como las del FMI son insuficientes. La OLP incluso cree insuficiente el cálculo del FMI y estima que va a necesitar más de 11.000 millones de dólares en los próximos siete años para garantizar el desarrollo y la paz en sus territorios.

Funcionarios norteamericanos han advertido que la conferencia celebrada ayer es sólo un primer paso en la colecta internacional y confían en que, en el futuro, los palestinos encuentren más generosidad, sobre todo entre los países árabes.

En la víspera de la reunión de ayer, el secretario de Estado norteamericano, Warren Christopher, mantuvo conversaciones con prácticamente todos los ministros árabes presentes en la Asamblea General de las Naciones Unidas para pedirles un esfuerzo mayor en respaldo del acuerdo firmado el 13 de septiembre en Washington.

Los países del Golfo han ofrecido hasta ahora 200 millones de dólares; los doce países de la Comunidad Europea, 600 millones; Japón, 200 millones, y los países nórdicos, 140 millones. Washington quiere pedir una contribución mayor a las monarquías petroleras del Golfo.

Israel también quiso mostrar su compromiso con el acuerdo de paz y aportará 75 millones de dólares para financiar la autonomía palestina. Nabil Shaath, consejero del dirigente palestino Yasir Arafat, agradeció en Washington el gesto, pero añadió que la ayuda israelí no supera lo recaudado en los territorios ocupados en concepto de impuestos.

El presidente Bill Clinton recibió ayer conjuntamente al primer ministro israelí, Isaac Rabín, y al príncipe heredero de Jordania, Hassan, para discutir la marcha de las conversaciones de paz en Oriente Próximo. Este acto, la primera reunión pública entre un alto funcionario israelí y otro jordano, pretende ser una versión a escala reducida del que tuvo lugar el pasado día 13 en la Casa Blanca.