Difícil consenso en la reforma de desempleo

La negociación de la reforma de la protección del desempleo se presenta complicada, ya desde la primera reunión celebrada en la tarde de ayer. Los dirigentes de UGT, Apolinar Rodríguez, y de CCOO, José María Fidalgo, coincidieron en señalar que el consenso en este punto del pacto social es muy difícil.La posiciones de partida de la Administración y de las centrales están sin duda lejanas. El Gobierno ha elaborado un paquete de medidas para frenar el déficit en las prestaciones de desempleo, con el objetivo de alcanzar un ahorro de unos 400.000 millones de pesetas. Los sindicatos, mientras, consideran que el déficit no es tal, sino que se debe a una mala presupuestación que ellos vienen advirtiendo en los últimos años.

Ayer los representantes del Gobierno explicaron de nuevo sus propuestas, entre las cuales figura que los parados con subsidio empiecen a tributar en concepto del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y a pagar las cotizaciones a la Seguridad Social que ahora abona por ellos la Administración. Otras medidas son denegar el derecho de prestación a los trabajadores que vayan al paro tras negarse a la movilidad geográfica y la eliminación del tope mínimo de prestación contributiva -el 75% del salario mínimo- salvo para los desempleados con hijos a cargo.

José María Fidalgo, de CC OO, dedicó duros calificativos al conjunto de medidas que propone el Gobierno: "Son duras, coactivas, posiblemente ineficientes y afectan a derechos". Criticó la forma del Gobierno de abordar el paro, como "un problema contable, cuadrando a martillazos los números y llevándose por delante prestaciones y derechos".

El representante ugetista, Apolinar Rodríguez, utilizó adjetivos similares y criticó que ayer no se propusiera ni una sola medida contra el fraude cuando "el Gobierno intenta presentar un discurso de culpabilización" sobre los parados. Los dos sindicatos creen que "para una salida solidaria, hay que reducir el paro, frenar la eventualidad y la rotación de trabajadores temporales en el paro y luchar contra el fraude".

La patronal CEOE, que apenas participó, cree necesario "vislumbrar un horizonte de empleo" para poder estudiar la evolución del paro y su cobertura.