Un empresario de Guipúzcoa chantajeado por ETA se lleva su empresa a Zaragoza

El empresario Juan Manuel Arruabarrena, propietario de la firma Pastas Arruabarrena, radicada en Lazkao -en la comarca guipuzcoana del Gohierri-, ha optado por trasladar su empresa a Zaragoza, después de haber sido sometido al chantaje económico de ETA.La noticia, adelantada ayer por la agencia Efe, fue corroborada a última hora de la tarde por la patronal guipuzcoana Adegui, en una reunión en la que el comité ejecutivo de esta organización patronal reiteró su compromiso de seguir apostando por este país".

Tras mostrar su comprensión hacia este tipo de decisiones personales, Adegui subraya "el compromiso firme demostrado día a día por los miles de empresarios guipuzcoanos" y asegura que ese compromiso "es la mejor manera de hacer frente a la dinámica y objetivos de ETA y de todos aquéllos que con sus acciones, sus adhesiones y silencios apoyan la dinámica terrorista". A juicio de la organización empresarial guipuzcoana, "la dinámica de ETA no tiene más objetivo que convertir a Guipúzcoa y a toda Euskadi en un desierto industrial".

Antes de tomar la decisión de abandonar el País Vasco, el dueño de la empresa estudiaba la posibilidad de ampliar su negocio y añadir un nuevo pabellón industrial, que hubiera supuesto la creación de 12 nuevos puestos de trabajo.