Nueva fuga radiactiva en una planta militar de Siberia

El gigantesco complejo militar de Mayak, situado en la ciudad secreta de Cheliabinsk-40, en Siberia (Rusia), sufrió el lunes una nueva fuga nuclear, la segunda en dos semanas en la zona. El 19 de julio se produjo otra fuga muy cerca, en Cheliabinsk-65. El accidente, que no produjo víctimas, fue dado a conocer ayer por el Ministerio de Energía Nuclear ruso. La fuga tuvo lugar en el almacén de residuos radiactivos. Alrededor de 2.000 litros de agua radiactiva salieron al exterior y contaminaron un área de unos 100 metros cuadrados, según el portavoz oficial. -Según el ministerio, la radiactividad alcanzó casi los 300 milicurios y ningún trabajador sufrió radiaciones más altas de lo permitido por las medidas de seguridad, Mayak, como otras instalaciones secretas, fue creada por la URSS para procesar uranio y plutonio para la fabricación de armas nucleares.

Los medios de comunicación rusos han publicado numerosos reportajes en las últimas semanas con declaraciones alarmistas de personas que trabajan en instalaciones nucleares mostrando su preocupación por las deficientes condiciones de seguridad.

Tras la explosión causada en Tomsk-7 en abril, el presidente ruso, Borís Yeltsin, ordenó aumentar las medidas de seguridad en todas las plantas nucleares rusas. Los expertos occidentales temen que el colapso que sufre Rusia suma en el caos a todas estas instalaciones nucleares.