Los inspectores de la ONU dicen que Irak ya no tiene capacidad nuclear

Las Naciones Unidas extendieron ayer un certificado de defunción a las ambiciones atómicas de Irak y cerraron el informe nuclear sobre Sadam Husein. Irak, dijeron los inspectores de la ONU, ya no está en condiciones de construir armas nucleares tras la sistemática destrucción de las instalaciones que hasta ayer inspiraban serios temores, sobre todo en Israel.El problema ahora es otro: asegurarse de que Sadam Husein no vaya a intentar subrepticiamente resucitar un programa científico al que todo el mundo le otorga intenciones maléficas. "Energía nuclear" y "fines pacíficos" son términos que simplemente no conjugan en el razonamiento occidental.

De momento no hay que preocuparse. Ése fue el dictámen de la comisión de expertos de la ONU, que abandonó Bagdad con un largo inventario de operaciones de demolición bajo el brazo.

Bob K.elley, un experto del Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA), con más de veinte años de experiencia, dijo poco antes de partir hacia Bahrein que, a su juicio, Irak no está ocultando reactores capaces de producir plutonio. "No hay razón alguna para creer que existe un reactor oculto en Irak", dijo.

Kelley es parte del equipo de la ONU encargado de supervisar la transferencia de combustible radiactivo de uranio de Irak a Rusia, como parte del plan para eliminar toda poslibilidad de que Irak se embarque en la fabricación de armas de destrucción masiva. El programa nuclear de Irak, dijo Kelley, "ha sido dañado, devastado, liquidado".

Irak debe aceptar ahora que la ONU, en virtud de decisiones adoptadas tras el armisticio ¿le 1991, implante estrictos controles en todas las instalaciones militares potencialmente: capaces de producir armas de destrucción masiva. Bagdad ha dicho que semejantes condiciones equivalen a doblegarse a EE UU.