España declara en la ONU que "comprende" la acción de EE UU

El embajador de España ante las Naciones Unidas, Juan Antonio Yáñez-Barnuevo, que ostenta la presidencia de turno del Consejo de Seguridad, declaró ayer en la sesión del órgano de la ONU que 11 a la luz de toda la evidencia, España comprende la acción de Estados Unidos, aunque lamenta que haya habido que recurrir a este extremo y deplora que se hayan producido víctimas civiles". El embajador expresó además la "solidaridad y simpatía" de España hacia EE UU y Kuwait, afectados por las "maquinaciones y acciones de los servicios secretos iraquíes", en alusión al frustrado intento de asesinar al ex presidente George Bush durante su visita a Kuwait el pasado mes de abril.Yáñez-Barnuevo añadió: "España condena sin paliativos toda manifestación de terrorismo especialmente cuando, como en este caso, se produce con la implicación de agentes de un Estado extranjero". Finalmente, el embajador español tomó nota de la aclaración estadounidense de que la represalia militar tuvo un "carácter limitado y puntual" y expresó la esperanza de que "una situación como ésta no se repita" y de que el régimen iraquí "escuche de una vez por todas el clamor de la comunidad internacional, se abstenga de cualquier acción provocadora y coopere plenamente y de buena fe con las exigencias" del Consejo de Seguridad.

Legítima defensa

Estados Unidos, que convocó la reunión de ayer con carácter de urgencia para informar al Consejo de Seguridad sobre el ataque contra Bagdad el pasado sábado, esgrimió el argumento de legitima defensa para justificar la acción militar. La representante de Estados Unidos ante las Naciones Unidas, Madeleine Albright, presentó varias fotografías del coche bomba y de explosivos y circuitos que presuntamente iban ser utilizados para atentar contra el Bush, y afirmó que Irak "planificó" todo, equipó y lanzó" la conspiración.

"No pido ninguna acción del Consejo, pero, a nuestro juicio, cada uno de los países miembros consideraría un intento de asesinato contra su ex jefe de Estado como un ataque contra sí mismo y reaccionaría", dijo Albright, y aseguró que Estados Unidos "no se precipitó" en las conclusiones de su investigación.

Nizar Hamdun, el representante iraquí ante el Consejo, negó toda implicación de su país y denunció la represalia militar de EE UU como una "agresión". "Irak ha negado y niega toda participación" en el intento de asesinato del ex presidente y "reta a las partes a demostrar claramente" la presunta implicación de Bagdad en el compló, declaró Hamdun, quien solicitó que se informe. a una tercera parte, independiente, de las alegaciones estadounidenses. Hamdun sostuvo que Kuwait "fabricó" el incidente y que Estados Unidos ordenó la acción militar para fines de política interior.