Aviones de la Alianza Atlántica patrullarán el cielo de Bosnia-Herzegovina a partir del lunes

Setenta aviones de combate de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), aportados por Estados Unidos, Francia y Holanda, empezarán a patrullar a partir del próximo lunes el cielo de Bosnia-Herzegovina. La medida, adoptada el jueves en Bruselas, sigue a la decisión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas de reforzar la prohibición de volar sobre el territorio bosnio, continuamente violada por aparatos serbios. Es la primera vez que la OTAN actuará fuera de las fronteras de los países miembros de la Alianza. En las misiones participarán militares alemanes, tras levantar el Tribunal Constitucional el veto que pesaba sobre el Ejército alemán de intervenir en acciones en el exterior.

Los 16 países miembros de la Alianza Atlántica aprobaron el jueves, tras largos debates, los planes definitivos para el depliegue sobre territorio bosnio. Estados Unidos participará con 24 aviones de combate, según anunció un portavoz del Departamento de Defensa en Washington. La mayoría de los 70 aparatos que tomarán parte en la misión se encuentran ya en bases italianas.La decisión era esperada el miércoles, pero se retrasó por la necesidad de fijar con claridad en qué momento podrán los aviones derribar a los aparatos serbios que violen la zona de exclusión. Otras fuentes señalaron, sin embargo, que a última hora surgieron problema sobre la coordinación del despliegue. Francia, que no forma parte del comité militar de la Alianza, quería que las Naciones Unidas coordinaran la posible acción armada, señalaron fuentes diplomáticas. De esta forma, París trataba de proteger mejor la seguridad los cascos azules (5.000 franceses) que cumplen misiones de ayuda humanitaria en Bosnia.

En cambio, Estados Unidos deseaba una acción menos ligada a la ONU, pues considera que el permiso para disparar contra una aeronave que viole el espacio aéreo bosnio no es necesario, ya que está implícito en la resolución 816 de la ONU. Más de 500 violaciones de la exclusión de, vuelo sobre Bosnia han sido contabilizadas por observadores de Naciones Unidas, la mayor parte de ellas por aviones y helicópteros serbios.

El secretario general de la Alianza Atlántica, Manfred Wörner, restó importancia al retraso y añadió: "La cuestión principal es que la Alianza Atlántica está totalmente de acuerdo en apoyar a las Naciones Unidas".

Fuentes de los radicales serbios de Bosnia declararon ayer que la decisión de la Alianza Atlántica de garantizar la zona de exclusión aérea sobre Bosnia "es una clásica forma de agresión contra un Estado soberano y su gente".

La vigilancia del cielo de Bosnia representa la primera misión que aborda la OTAN fuera de las fronteras de los países miembros de la Alianza y supone un paso significativo en las tareas de apoyo a decisiones de las Naciones Unidas.

La operación será llevada a cabo desde el cuartel general de la OTAN en Vicenza, en el noreste de Italia, y estará supervisada por el comandante aliado para Europa, el general John Shalikashvili.

Por otra parte, el Tribunal Constitucional alemán, con sede en Karlsruhe, dio el jueves luz verde al Gobierno de Bonn para que efectivos alemanes puedan tomar parte en la vigilancia del cielo de Bosnia-Herzegovina y hacer así cumplir la decisión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que prohíbe el sobrevuelo de la antigua república yugoslava.

Los ocho jueces estimaron que sería peligroso para las misiones de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), cuyos aviones patrullarán el cielo bosnio a partir del lunes, que los soldados alemanes fueran apartados de la tripulación de los aparatos AWACS de vigilancia.

Victoria de Kohl

La decisión del alto tribunal representa una victoria para el Gobierno de Helmut Kohi. El Partido Liberal, que forma parte del Gobierno, de Bonn, y la oposición socialdemócrata habían interpuesto recursos ante el tribunal de Karlsruhe contra la decisión de los democristianos de la CDU de implicarse militarmente en el conflicto. Sin embargo, tras la decisión del Tribunal Constitucional, los partidos que forman la coalición de Gobierno se reconciliaron y manifestaron su satisfacción.

El origen del litigio obedecía a la prohibición de participar en misiones en el extranjero que la Constitución alemana, impuesta por los aliados después de la Segunda Guerra Mundial, impone al Ejército germano. Será, por tanto, la primera misión militar alemana en el extranjero desde 1945.