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GUERRA EN LOS BALCANES

Musulmanes contra croatas

Temor a un estallido bélico entre dos fuerzas teóricamente aliadas

Las tropas del Ejército bosnio acusan a las fuerzas del Consejo de Defensa Croata (HVO) en Herzegovina y al Gobierno de Croacia de sistemático robo de armamento, obstrucción a sus suministros e intentos de imponer en la región su supremacía por criterios étnicos. Fuentes del Ejército bosnio, compuesto mayoritariamente por musulmanes, consultadas por EL PAÍS en Herzegovina, advierten sobre el peligro de escalada del conflicto entre estas dos fuerzas, tras el ultimátum del presidente de la comunidad croata, Mate Boban, al Ejército bosnio para que se subordine al mando del HVO en esta región.

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Aunque oficialmente aliadas en la guerra contra las fuerzas serbias, son grandes las tensiones entre el Ejército bosnio, básicamente musulmán, y las Fuerzas Armadas croatas, bajo el mando del ultranacionalista Boban.En algunas zonas rurales se produjeron en enero duros combates entre estos dos ejércitos con gran número de víctimas. Las fuerzas croatas expulsaron de varios pueblos a la población musulmana, y en algunos de ellos, como Prozor, siguen sin permitir el regreso de los fugitivos. En Prozor y Gorni Vakuf, el RVO dinamitó y quemó decenas de casas para que sus propietarios no pudieran volver.

El mando militar bosnio en Mostar denunció a este periódico el robo de armamento y suministros como una de las causas principales del deterioro de las relaciones. Hodo Esad, comandante de un regimiento en la región, relató cómo, días antes de que el Gobierno de Croacia se presentara ante la opinión pública mundial como un adalid del respeto al embargo (le armas al detener en Zagreb un cargamento de armas iraníes, él fue testigo de la entrega a las autoridades croatas de un 20% de un gran cargamento de armas llegadas en barco a Rijeka.

"Aquello era más o menos el pago de aduana y uso del puerto. Nos escoltaron hasta la frontera con Bosnia, pero allí el RVO exigía otro 20%, que les tuvimos que dar. Después, al traer desde Konjic a Mostar parte de las armas, querían obligamos a depositarlas en sus almacenes. Nos negamos. Hubo tensión, pero no violencia".

Huida serbia

"Cuando liberamos la margen izquierda del río Nerava, los serbios huyeron de pánico y abandonaron todo, piezas de artillería, armas y munición. Nosotros seguíamos avanzando y dejábamos atrás el armamento. Fuerzas del HVO venían detrás nuestro y se llevaron todo. Después, cuando combatimos con el HVO en Gorni Vakuf les arrebatamos cañones que identificamos como aquellos que nos habían arrebatado aquí".

Mostar, la otrora bella capital de Herzegovina, en su mayor parte destruida por los bombardeos serbios, es el centro del pulso entre el Ejército multiétnico dependiente del Gobierno de Sarajevo y el HVO, que ha creado un fuerte ejército que, al menos en esta región, sólo obedece a órdenes del partido croata (HDZ) y de Zagreb. La política de supremacía étnica croata en Herzegovina ha recibido un fuerte espaldarazo con la firma por croatas y musulmanes del plan de paz internacional de David Owen y Cyrus Vance, que otorga a los croatas las dos provincias de que consta. "Cada vez tenemos menos croatas en nuestras filas, ya que éstos están sometidos a una fuerte presión para ingresar en las filas del HVO. Hace 15 días pegaron una paliza a un oficial nuestro que es croata. Ahora mismo tenemos más serbios que croatas en el Ejército bosnio aquí en Herzegovina".

El comandante Esad no tiene ninguna duda sobre las intenciones últimas del HVO. Ahora están jugando políticamente, prueban cada poco tiempo nuestra capacidad y voluntad de resistencia, pero quieren un Estado croata dentro de de Bosnia para ir hacia la anexión con Croacia". "El fin es el mismo de serbios y croatas. Los métodos son diferentes. Mientras los serbios dan la patada a la puerta delantera para asaltarte, los croatas se deslizan por la puerta de atrás", añadió un oficial.

El presidente de la Comunidad de Herzeg-Bosna, Jadranko PrIjic, "algo así como el primer ministro de esta región", asegura, niega rotundamente que ése sea el objetivo. "Nosotros somos parte de Bosnia-Herzegovina y este Estado todavía existe porque la comunidad croata es leal al mismo. Si nosotros abandonáramos las instituciones como los serbios, el Estado habría acabado".

Según PrIjic, el Gobierno de Herzeg-Bosna se formó como órgano ejecutivo a la vista del colapso en esta región de las instituciones de la república. "El plan Vance-Owen demuestra que nuestra política fue correcta". El líder croata reconoce que no ha habido integración de las los fuerzas armadas pese a las alianzas oficiales proclamadas y explica porque "nuestros objetivos militares son distintos".

"Ellos aún quieren un Estado unitario. Para nosotros es inaceptable. Dentro de unos años serían mayoría. Nosotros somos el 17% y pronto seríamos menos del 10%. Ellos entonces impondrían un Estado islámico", señaló en absoluto acuerdo con las tesis proclamadas por el líder serbio Radovan Karadzic para explicar su recurso a la guerra. Sin embargo, según PrIjic, el HDZ quiere mantener, como parte integrante autónoma dentro de Bosnia. "Nos conviene más que ser una simple región más en Croacia

El dirigente croata negó rotundamente que las fuerzas del HVO bloqueen ayuda humanitaria destinada a regiones musulmanas, pero reconoció implícitamente que han impuesto al ejército bosnio "repartos" de armas. "Prefiero no hablar de cuestiones militares, pero el HVO no ha recibido nunca nada del Gobierno de la república y todo el dinero de la república se va en compras de armas que van a los musulmanes".

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