Es peligroso asomarse
No han aparecido todavía todos los créditos y ya se oyen, en off, los jadeos de Madonna. Primera secuencia: un vídeo reproduce a la cantante cabalgando a lomos de un maduro partenaire, convenientemente esposado a la cama. Más tarde: Madonna seduce: a su abogado defensor (ha sido acusada de asesinar, por vía de la fornicación, al mencionado maduro), lo ata con un cinturón, vierte sobre su cuerpo y su sexo cera de una vela y lo lame interminable, interminable, interminablemente para luego practicar algo muy parecido a una violación. Más tarde: la rubia mete mano en público a la. bragueta del abogado y, así cogido, se lo lleva a un aparcamiento, planta su sexo en la cara del paciente Dafoe y la cosa termina entre gritos, en el capó del coche y como a ella más le gusta: cabalgando. "Eso es lo que hago: yo follo", dice con cara de niña buena. Y más tarde aun: Dafoe pega, lame, fuerza, cierra las muñecas de Madonna con esposas, la inmoviliza y la sodomiza.Así contado, El cuerpo del delito tiene hasta gracia. Visto el filme, más bien no: se trata tan sólo de una tediosa, previsible, decididamente frustrante loa al personaje público Madonna, un complemento de la operación de marketing que promocionó el reciente libro de la diva. Complemento, además, construido a partir de méritos ajenos, puesto que nace del deseo -confeso y publicitado- de emular a Sharon Stone, Michael Douglas y un famoso picahielos. Como en Instinto básico, se trata aquí de contar la historia de una mujer a, la cual es peligroso acercarse, porque es el símbolo de una sexualidad desenfrenada y mortal pero a diferencia del filme de Paul Verhoeven, lo verdadera mente peligroso para la inteligencia es aquí sencillamente ve la película.
El cuerpo del delito
El cuerpo del delito (Body of evidence).Dirección: Ull Edel. Guión: Brad Mirman. Fotografía: Douglas Milsome. Producción: Dino de Laurentlis, EE UU, 1992. Intérpretes: Madonna, Willem Dafoe, Joe Mantegna, Anne Archer. Estreno en Madrid: Coliseum, Benlliure, Juan de Austria, Novedades, Cartago, California.
Babelia
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