Espectacular incendio en el puerto de Tarragona al chocar un petrolero contra el pantalán de Repsol

El petrolero danés Robert Maerks, cargado con 22.000 toneladas de gasolina, chocó a las 8.45 de ayer contra el pantalán de Repsol, cerca de¡ puerto de Tarragona, cuando iniciaba las maniobras de atraque. El golpe rompió 200 metros del rack (haz de tuberías), lo que provocó el vertido de miles de litros de fuel y nafta en el mar, originando un espectacular incendio, seguido de varias explosiones. A 500 metros del pantalán se halla el polígono sur de la petroquímica de Tarragona, lo que hizo temer una catástrofe. Sin embargo, pese a la alarma provocada por el siniestro, no hubo víctimas.

El accidente ocurrió cuando el buque-tanque Robert Maenks, propiedad de la compañía danesa A. P. Möller, llegaba a Tarragona para atracar en el pantalán. El petrolero, procedía de La Coruña -ciudad en la que el pasado 4 de diciembre un petrolero griego se partió en dos derramando 80.000 toneladas de crudo que se incendiaron- y procedía a efectuar la maniobra de atraque cuando, posiblemente por un fallo mecánico, se empotró contra el pantalán.En ese momento, el buque Kapitan Putilin, de bandera rusa estaba descargando 57.000 toneladas de nafta. A corta distancia del foco de la deflagración estaba anclado el barco Gaz Coral que cargaba gas butadieno, altamente inflamable y explosivo.

Tras secccionar el rack del pantalán e iniciarse el vertido de los productos que contenía, se produjo una cadena de explosiones y el incendio de la nafta y el fuel. El grupo de tuberías tiene una longitud total de 1,5 kilómetros y el buque destruyó 200 metros.

El Robert,Maerks, el Kapitan Putilin y el Coral pudieron, por sus propios medios, alejarse del espectacular incendio y evitar, de esta manera, una catástrofe mayor, ya que los tres cargaban productos altamente inflamables.

Técnicos de Repsol procedieron al cierre inmediato de las válvulas de las tuberías, formadas por varios tramos estancos, con la finalidad de evitar una mayor emisión de productos derivados del petróleo al mar. Dotaciones de bomberos -40 hombres y 20 vehículos- necesitaron ocho horas para sofocar las llamas. Los remolcadores del puerto refrigeraron las tuberías para evitar explosiones.

El fuego, cuyas llamas llegaron a alcanzaron los 50 metros de altura, formó una imponente columna de humo que podía verse desde toda la ciudad y las comarcas cercanas.Alarma en la población

Desde las nueve de la mañana, centenares de llamadas de ciudadanos alarmados colapsaron las centralitas del puerto, Protección Civil y ayuntamientos de la zona, debido a las explosiones que precedieron al incendio y por la espectacularidad del siniestro. El Gobierno Civil de Tarragona activó el Plan de Seguridad Exterior Químico de Tarragona (Plaseqta) al catalogar el accidente como grave.

Protección Civil difundió mensajes tranquilizadores a los ciudadanos mediante las emisoras de radio, en los que aseguraba que no había peligro, puesto que las fugas no eran tóxicas. Pese a ello, el equipo directivo de la antigua universidad laboral, un complejo educativo con 2.000 alumnos acordó el desalojo preventivo del centro, que está situado en pleno corazón del complejo petroquímico sur de Tarragona y a menos de un kilómetros del pantalán.Protección Civil pretende combatir la mancha de nafta, cercándola con boyas y aplicando sobre ella material disolvente. Las pérdidas económicas sufridas por la compañía Repsol no estaban ayer evaluadas aunque se prevé serán muy cuantiosas ante los gravísimos desperfectos que ha sufrido el pantalán.

[Por otro lado, la oficina de reclamaciones para los damnificados por el hundimiento en La Coruña del petrolero griego Mar Egeo abrirá sus puertas el próximo lunes, según confirmó ayer el Gobierno Civil de la provincia, informa Europa Press].