Reino Unido y Alemania piden reajustes más frecuentes en el SME
ENVIADO ESPECIALEl presidente del Banco de Inglaterra, Robin Leigh-Pemberton coincidió ayer con Helmut Schieber, consejero del Bundesbank, en pedir reajustes más frecuentes y al margen de las decisiones políticas, en el Sistema Monetario Europeo. La petición se producía horas antes de que se iniciara la reunión del Comité Monetario de la CE, que luegó se saldó con la devaluación en un 10% de la libra irlandesa. También ayer, el primer ministro de Portugal, Anibal Cavaco Silva, criticó al banco central alemán por imponer su política monetaria al resto de los países europeos y por defender al franco francés al margen de los mecanismos del SME. Las tensiones monetarias se abrieron ayer un hueco en medio de los profundas discusiones macroeconómicas del Foro Económico Mundial que reúne a un millar de hombres de negocios, políticos y académicos en la localidad suiza de Davos. La nueva crisis del Sistema Monetario llevó a representantes políticos y financieros europeos a reclamar insistentemente una mayor agilidad para poner en marcha los mecanismos del SME.
Apoyo inmediato
En un debate celebrado el viernes por la tarde, Horst Siebert, presidente del prestigioso Instituto de Kiel -uno de los "cinco sabios" alemanes-, rompía el fuego al afirmar que "el SME debe plantearse reajustes necesarios y periódicos de sus monedas, al margen de las presiones política. Su propuesta, en línea con lo que viene defendiendo el Bundesbank desde la tormenta monetaria de septiembre, encontró el inmediato apoyo del todavía presidente del Banco de Inglaterra, Robin Leigh-Pemberton y de un consejero del banco central alemán que participaba en el debate.
Leigh-Pemberton, que ya ha anunciado su salida del banco el próximo mes de junio, afirmó que la principal lección de la crisis monetaria que obligó a la libra esterlina a abandonar el SME en septiembre es que "hay que hacer más ajustes en el momento en que sea necesario". A su juicio, los bancos centrales deben actuar con más independencia, sin hacer caso a los políticos que siempre se resisten a devaluar sus divisas por prestigio internacional. Helmut Schieber, consejero del Bundesbank, fue más allá al proponer limitar la intervención de los bancos centrales en defensa de sus monedas, porque lo único que se consigue es perder divisas y retrasar un reajuste necesario.
En este ambiente, el primer ministro portugués aprovechó la oportunidad para criticar al Bundesbank, por el mantenimiento de su política monetaria restrictiva y por su actitud durante la tormenta monetaria. Como ya hiciera en su día el ministro español de Economía, Carlos Solchaga, Anibal Cavaco Silva afirmó que "no es justo que el banco central alemán defienda al franco francés sin límites y deje en situación delicada al resto de las monedas europeas".
Cavaco no quiso opinar sobre la reunión del Comité Monetario y añadió que el mecanismo del SME "es insuficiente para dar respuestas a todos los problemas que se han planteado", aunque matizó que era lo único que teníamos y que había que mantenerlo y perfeccionarlo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.