El socialdemócrata danés Rasmussen logra formar un Gobierno de mayoría

El dirigente de la socialdemocracia danesa, Poul Nyrup Rasmussen, de 49 años, presentó ayer por la tarde el nuevo Gobierno cuatripartito danés a la reina Margarita y abandonó, por 24 horas y mientras se le confirmaba el Ejecutivo, la presidencia semestral de la Comunidad Europea (CE). El país que presidirá la CE durante el segundo semestre de 1993, Bélgica, fue el que aseguró la dirección de la reunión de ministros de Transportes y Medio Ambiente que se celebraba a última hora de la tarde de ayer en Bruselas.

El Gobierno de Rasmussen cuenta con el apoyo de 90 diputados de los 179 que forman el Folketing (Parlamento), caso excepcional en un país habituado a los gobiernos en minoría. Su antecesor, el conservador Poul Schlüter, descabalgado por un escándalo político, gobernó durante diez años siempre en minoría.Fuentes danesas aseguraron que hoy por la mañana, Dinamarca retorna plenamente la presidencia de la Comunidad y que el nuevo Gobierno asume por completo el programa de actuación europea presentado la pasada semana ante el Parlamento de Estrasburgo y hace dos semanas ante la Comisión Europea. La nueva mayoría cuenta también con el apoyo de los dos diputados de Groenlandia y los dos de las islas Feroe, territorios que no se hallan integrados en la CE.

El Ejecutivo de Rasmussen está formado por 15 ministros socialdemócratas, cuatro del centro democrático, tres del Partido Radical Liberal y dos de la democracia cristiana. De ellos, ocho son mujeres. El primer ministro ha dejado fuera del Gabinete tanto a los dos partidos que nucleaban el anterior Gobierno (el Conservador de Schlüter y el Liberal del popular ex ministro de Exteriores, Uffe Ellemann-Jensen), como al más izquierdista Partido Socialista Popular, que cuenta con 15 escaños y, por supuesto, a la extrema derecha del partido del progreso, que tiene 12 escaños.

Ocho de los nueve partidos presentes en el Folketing, incluidos los cuatro que están en el nuevo Gobierno, han consensuado los documentos sobre la nueva posición de Dinamarca en la CE, así como el discurso de la presidencia danesa pronunciado por Ellemann-Jensen ante el Parlamento Europeo. No habrá, en consecuencia, una segunda presentación de la política del Gobierno danés ante Europa, según confirmaron fuentes diplomáticas.

El lema de la presidencia danesa es Europa abierta y estará centrada, fundamentalmente, en la ratificación del Tratado de Maastricht en un segundo referéndum que se celebrará en Dinamarca, probablemente el próximo mes de mayo. El cambio de Gobierno facilitará la obtención esta vez de una mayoría en favor de Maastricht, después de la situación especial obtenida por Dinamarca en la cumbre de Edimburgo respecto a la defensa europea, la moneda única, los asuntos de justicia e interior y la ciudadanía.Sondeos sobre MaastrichtLos sondeos de opinión han cambiado de signo en los últimos meses y proporcionan de momento una amplia mayoría a los partidarios del sí, un 53%, frente a un 31% para los partidarios del no. La caída de Schlüter ha sido interpretada por muchos observadores de la política danesa como el efecto final del referéndum de junio de 1992, en el que los ciudadanos rechazaron el Tratado de Maastricht.

Numerosos altos responsables comunitarios se lamentaron en aquel entonces de que las explicaciones de Schlüter parecían sugerir que los responsables de la derrota de Maastricht en Dinamarca eran los otros once socios comunitarios y la propia Comisión Europea y no el Gobierno, desautorizado en la consulta.

El nuevo ministro de Asuntos Exteriores, Niels Helveg Petersen, del Partido Radical Liberal, ha sido ministro de Economía con Schlüter desde 1988 hasta 1990 y pertenece a una familia de sólida implantación en la política danesa. Petersen tendrá que Intentar eclipsar las espectaculares actuaciones de su predecesor, Elleman-Jensen.