La presión fiscal en Cataluña
Uno de los argumentos que -con más asiduidad gusta de emplear Ángel Colom, líder de Esquerra Republicana de Catalunya, en defensa de sus reivindicaciones políticas es la persecución fiscal que Cataluña sufre por parte del Estado. Escuchándole en cierta ocasión en un programa de radio en el que era entrevistado, llegó incluso a afirmar que la cantidad de dinero que el Estado recauda en Cataluña es muy superior a la de cualquier otra comunidad autónoma española.Sin embargo, esto último no es correcto en absoluto. En 1983, se gán la memoria fiscal del ejercicio, los madrileños pagaron en impuestos directos e indirectos cerca de 0,8 billones de pesetas, el 291/6 de los 2,74 billones de pesetas que el Gobierno recaudó en toda Es paña. En 1990, fecha de la última memoria fiscal publicada, el porcentaje ascendió al 41%, pues en Madrid se recaudaron 3,5 de los 9 billones que el Estado obtuvo de ingresos fiscales en toda España. En Cataluña, la región con la que Madrid tiene el mayor parecido en su estructura socioeconómica, el balance de estos años es más favorable. En 1983, los catalanes pagaron en impuestos estatales 0,6 billones de pesetas, el 21,9% del total recaudado por el Gobierno en toda España. En 1990, el porcentaje bajó al 20,6% tras recaudarse allí 1,8 de los 9 billones obtenidos en el total del Estado. El próximo año, según los Presupuestos Generales del Estado, a Madrid le corresponderán únicamente 130.897 millones de pesetas, un 11% tan sólo del total de las inversiones públicas estatales, que ascenderán a 1,185 billones de pesetas. Todos estos datos demuestran que, si bien es cierto que Cataluña soporta una alta presión fiscal por parte del Estado, no es en absoluto la comunidad autónoma peor tratada en el aspecto fiscal. Creo que no es lícito ni justo emplear la demagogia para arrancar votos
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