Soluciones geométricas

Serie "For..."Tony Smith. Sala Relcalde. Alameda de Rekalde, 30. Bilbao. Hasta el 31 de enero de 1993.

Distintas propuestas expositivas recalan simultáneamente en el País Vasco tras su exhibición en otras ciudades del Estado, como son La pintura holandesa. Escuela de Utrecht, en la sala del Banco Bilbao Vizcaya de Bilbao (hasta el 31 de diciembre), Pintura española del siglo XIX. Del neoclasicismno al modernismo, en la sala América de Vitoria (hasta el 17 de enero), Gráfica de los años sesenta en Alemania en Bellas Artes de Bilbao (hasta el 10 de enero) y la serie For.. . del escultor norteamericano Tony Smith, en Rekalde de Bilbao. La serie de nueve piezas de bronce de Smith (South Orange, Nueva Jerey, 1912-Nueva York, 1980), deada durante su colaboración como profesor de la Universidad de Hawai en 1969, se presenta en Bilbao tras su instalación al aire libre en el polígono AZCA de Madrid edurante dos meses el pasado verano.Dedicadas a otras tantas personalidades y amistades del escultor, cuyas iniciales acompañan al título lo genérico de cada una de las piezas, su actual emplazamiento en el neutro y ortogonal espacio de Rekalde resalta la coherencia estructural y espacial del conjunto con la que las concibió el autor.

La monumentalidad clásica de as soluciones geométricas propuestas por Tony Smith, la presencia rotunda de su volumetría constreñida por el negro tratamiento de sus superficies, aisladas como están del entorno natural para el que fueron concebidas y diseñadas, se nos muestra ahora a otra escala, cercana a la antropometría de la que arrancan la mayor parte de sus esculturas.

Instalado generaciohal y prácticamente dentro de las tendencias minimalistas y conceptuales de finales de los años sesenta, junto con sus compatriotas Robert Morris, Carl Andre o Donald Judd, la obra de Smith se sitúa en un contexto espiritual y cultural más amplio como es el del clasicismo; para ser más exactos, en el punto crítico previo a la disolución del mismo donde se fundamenta el pensamiento moderno y donde a la imagen de orden que lo legitimaba se opone la siniestra presencia de lo subjetivo.

La trayectoria del escultor, estadounidense, elocuentemente resumida por estas nueve piezas, desarrollada como una línea continua de investigación sobre los elementos básicos del lenguaje escultórico como son el espacio, la forma, el volumen y la luz, se aleja, sin embargo, de las corrientes más sistemáticas y formalístas del momento, para concentrarse en el conflictivo punto de tensión entre lo racional y lo onírico. Como el mismo escultor llegó a decir, "todas mis esculturas están en el límite de los sueños. Están cerca de lo inconsciente a pesar de su geometría. A cierto nivel, mi trabajo tiene claridad. A otro, es caótico e imaginado".