Miedo
Como español que soy, nacido en el País Vasco, convivo, o por lo menos eso intento, coja un grupo de simpatizantes de ETA y HB (tanto monta, monta tanto). Pero realmente el motivo de mi carta es el de expresar mi impotencia. Yo no puedo expresar mis ideas políticas libremente, ya que no son del agrado de esta gente. Tengo que tener cuidado al exteriorizar mis sentimientos, para proteger mi integridad física o para que no se queme accidentalmente el coche de mi padre, tengo que aguantar, como mucha otra gente, expresiones como la de: "Vete a tu país si piensas así", y otro tipo de lindezas que no son merecedoras de ser citadas. Por otra parte, día tras día, puedo ver cómo esa gente va a manifestaciones de apoyo a ETA, pegan carteles en las calles con alusiones contra la policía, se pavonean con sus chapitas de Amnistía, se expresan libremente y sin temor alguno (como es normal) sobres sus ideas políticas y de otra índole. Pero yo, defensor de la pluralidad de ideas políticas siempre que no atenten contra los demás, defensor de la paz, respetuoso con otras creencias, etcétera, tengo que callarme, simplemente por miedo (que no es poco).Ahora que proliferan las biografías del anterior jefe del Estado, críticas mayúsculas, comentarios, etcétera, para bien o para mal esa época ya ha pasado, y pido simplemente que estos escritores y periodistas, sin olvidar la etapa anterior de España, se centren en la dictadura que se padece hoy en el País Vasco, porque, aunque no guste, es una dictadura; eso sí, de una inmensa minoría.
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