_
_
_
_
_

Nuevas pruebas añadidas al sumario refuerzan la conexión de Manuel Ollero con la red de comisiones

El intermediario Gustavo Durán se encargaba en Madrid de negociar con los grandes constructores del país, y emitía órdenes que en Sevifia recibía Pedro Llach. Éste telefoneaba a Jorge Ollero y le instruía para que hablase con su hermano Manuel, entonces director general de Carreteras. Del alto cargo dependía, por fin, conjugar los intereses de determinadas empresas y de la Junta de Andalucía en la adjudicación de obras públicas. Si alguien extraño se atrevía a dificultar la labor de esta perfecta estructura vertical -que se comunicaba con fluidez en los dos sentidos-, le eliminaban.

Más información
"Mensajes capciosos"

La incorporación al sumario del caso Ollero de, la transcripción de nuevas conversaciones telefónicas -más de 500 folios- grabadas por la policía judicial el pasado marzo del teléfono de Pedro Llach deja al descubierto el método usado para quitar de la circulación a Rafael Pérez de Miguel, alto ejecutivo de Fomento de Construcciones y Contratas (FCC), y su sustitución por otro directivo, Jesús Calvo.El ex director general de Carreteras de la Junta de Andalucía, Manuel Ollero, había manifestado en varias ocasiones a su hermano que no se entendía con Rafael Pérez de Miguel y sí, en cambio, con Jesús Calvo. Jorge Ollero, quien más tarde sería detenido por la policía con los 22 millones procedentes del cobro de una comisión de la constructora Ocisa, transmitió tal preocupación a Pedro Llach y éste, a Gustavo Durán. La contestación, y con ella la solución, llegó a los pocos días, cuando Gustavo Durán llama a Pedro Llach:

,En esa conversación, cuya transcripción figura en el sumario, Durán le informa a Llach que ha hablado con Guillermo Visedo, presidente de Fomento de Construcciones y Contratas, para abordar el problema. Durán comunica a Llach el resultado de la gestión: Jesús Calvo «está por encima" de Pérez de Pérez de Miguel y, por lo tanto, "no volverá a aparecer":

."Que, vamos, que ya [Pérez de Miguel] no puede ser ningún obstáculo porque no volverá a aparecer...", afirma categórico Durán.

El intermediario Pedro Llach no parece quedar absolutamente convencido con la explicación de Durán e insiste: "Sí. Tú le tienes que decir a éste, a éste, que Jesús tiene plenos poderes para negociar, y abordar la historia completamente, ¿comprendes?

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Gustavo Durán le asegura entonces que a la mañana siguiente hablará personalmente con Jesús Calvo, que, a su vez, "ya habrá hablado con Willie".

La conversación concluye en los siguientes términos:

Llach: Y tiene que tener un tacto tremendo Jesús, ¿eh?. Y que tiene que ir y decirle que el Pérez de Miguel y el segundo de Pérez de Miguel que no van a aparecer por ahí para nada y que cualquier problema que tenga él con Sevilla que se lo diga [a Manuel Ollero] que se lo resuelve sobre la marcha.

Durán: Bien.

.Llach: Porque si se huele lo más mínimo o hay lo más mínimo, nos vamos a hacer gárgaras.

Los intermediarios Gustavo Durán y Pedro Llach se despiden y cuelgan el teléfono.

Pedro Llach sigue trabajando. Llama al hermano del ex director de Obras públicas de la Junta de Andalucía, Jorge Ollero, también conocido por el Negro, y en un tono más coloquial le traduce los logros de Gustavo Durán para apartar al directivo de FCC que les resulta incómodo.

"Mira, vamos a ver, hoy han estado hablando con el Willie, y confirma todo lo que yo te dije.. Éste [Pérez de Miguel], si quieren verlo van a tener que pedir una fotografía", dice Llach en el arranque de la conversación.

E insiste: "Al Rafael Pérez de Miguel. Ése y su segundo no, van a aparecer, pero no ahora, sino seguramente nos lo quitan pero han pedido un cierto tiempo, porque no lo quieren hacer de forma estridente. Yo le he dicho lo que le tienen que decir, porque mañana hablan con Jesús...

Onero le pregunta si la entrevista se va a celebrar en Madrid. Llach se lo confirma: "Sí, sí, que está en Madrid. El lunes hablan con él, seguramente ya vendrá [a Sevilla] el martes, ¿comprendes? Va a traer plenos poderes para hacer lo que concuerden los dos, para que tú se lo digas al Cacerolo [Manuel Ollero, el alto cargo de la junta de Andalucía], porque si él [Pérez de Miguel] quería hacer la puñeta, más puñeta que ésta ya imposible, ¿no?, lo hemos dejao planchao, lo hemos dejado en una... eso ha sido una putada que le hemos hecho a éste, y gorda, ¿eh?, para su carrera...

Llach trata de disipar las posibles dudas que queden en Jorge Ollero: "Sí sí no ya lo verás, ya lo verás. Éso es seguro, después de lo que yo he hablado, seguro. Yo conozco cómo se mueven, no ves que esta gente no tienen, tienen muy poco corazón, les da igual lo quitan y fuera, que le den morcilla... Entonces mañana van a hablar con Jesús, le van a dar plenos poderes..."

Y continúa la conversación:

'Poner en bandeja'

Llach: Ahora lo importante es que tú esta noche hables con Cacerolo y le pongas en antecedentes de todo, porque él puede aprovechar ahora y hacer lo que le dé la gana.Ollero: Sí.

Llach: Todo se lo hemos puesto en bandeja ( ... ) y tú prepárate para tener al Cacerolo perfectamente ubicado.

La relación de Manuel Ollero con las principales constructoras del país fue admitida, en parte, por el propio ex alto cargo en su comparecencia del pasado miércoles ante la comisión de investigación del Parlamento de Andalucía.

Manuel Ollero reconoció allí que conocía, al menos, otros tres intentos de cobro de comisiones a la constructora Fomento de Construcciones y Contratas (FCC), cuyo presidente es Guillermo Visedo, el Willie de las conversaciones intervenidas por la policía Judicial.

El ex director de Carreteras de la Junta de Andalucía, Manuel Ollero, declaró que no transmitió estos hechos al consejero de Obras Públicas de la junta, Juan López Martos, porque no les dió importancia.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_