"Han pasado dos años y seguimos aquí" dice un ministro de Sadam
"No hay ni una línea en las resoluciones de las Naciones Unidas que afirme que el bloqueo a Irak no se vaya a levantar hasta la caída de Sadam Husein" asegura Hamad Youssef Hamadi, ministro de Información durante una entrevista concedida a EL PAIS. "Eso son cosas de Bush, Major e Israel". "Han pasado dos años y seguimos aquí y estamos dispuestos a aguantar otros veinte" advierte Hamadi.
El ministro de Información de Irak, Hamad Hamadi, habla despacio, con un rosario verde entre las manos. No se altera nunca, ni cuando asegura que las sanciones han matado a 170.000 niños iraquíes desde agosto de 1990. Detrás de su cara, marcada de cicatrices, parece esconderse un hombre extremadamente frío.Hamadi, que recuerda la historia común, pide a España una "mayor presión sobre los países malvados" en los principales foros internacionales porque "el bloqueo contra Irak no tiene precedentes en la historia, pues éste mata a la gente".
El ministro subraya que la invasión de Kuwait no fue en momento alguno un error, y asegura que éste "es un problema viejo", con más de 70 años de existencia, y "que sigue sin estar solucionado". Hamadi advierte de una forma indirecta que Kuwait es una parte de Irak: "Los grandes poderes -las potencias colonialespueden jugar a la geografía, pero no borrar la historia".
Hamadi se queja de que EE UU considere a Irak un paria por tener -según ellos- un régimen dictatorial y poseer armas de destrucción masiva y 11 no se plantee el mismo asunto con el rey Fahd de Arabia Saudi, los jeques del petróleo, Rafsanyani, Assad o Mubarak". En cuanto a las armas, Hamadi reclama el mismo derecho a tenerlas que Israel.
La clave: el petróleo
La razón de lo que llama "doble moral" de Estados Unidos es, a su juicio, muy clara: "Quieren dominar el petróleo de Irak, y para lograrlo desean colocar en Bagdad un Gobierno títere, como el del rey saudí Falid, y puedo decir que EE UU no ha tenido éxito y no lo va a tener".Respecto a las dos zonas de exclusión aérea, Hamadi se pregunta: "¿Cuál sería la actitud de España si le impusiera una zona similar en el País Vasco?". El ministro separa la situación del porte por encima del paralelo 36 con la del sur del paralelo 32, que es una zona de exclusión aérea. Y acusa a los kurdos de ser "rehenes de EE UU".
"Es curioso", dice, "esta zona se ha convertido en una tragicómica representación del nuevo orden mundial: donde en una misma zona hay kurdos buenos a los que es necesario proteger -los iraquíes- y kurdos malos a los que se puede matar, los turcos".
El ministro niega rotundamente que haya actividad guerrillera alguna en los pantanos y califica de "normal" el elevado tráfico militar visto por este enviado cerca de Basora.
