Ahondar en las diferencias

El informe del Gobierno andaluz rezuma argumentos en contra de la cesión del 15% del IRPF a las comunidades autónomas, con la filosofía de que la medida haría a los ricos más ricos y a los pobres más pobres. Estos argumentos se basan en cifras que la Junta de Andalucía ha tomado del Ministerio de Hacienda, para demostrar que las autonomías con menor nivel de renta saldrían peor paradas que las más ricas (veáse cuadro).La desventaja para las, comunidades menos desarrolladas no radica en que recibirían menos ingresos del Estado, sino en que el 15% a ceder -y que cada comunidad podría gestionar automáticamente- representaría sólo una pequeña parte de esos ingresos, mientras para las comunidades ricas sería un elevado porcentaje.

Por ejemplo, Andalucía recibe como Participación en los Ingresos del Estado (PIE) más de 300.000 millones de pesetas. Con la cesión del 15% del IRPF sólo obtendría para gestionar automáticamente por este concepto 59.477 millones. Extremadura recibe cerca de 22.000 millones de pesetas en concepto de PIE. Con la cesión sólo obtendría para gestionar por este capítulo 6.461 millones, es decir, la tercera parte.

Los técnicos consultados reconocen que Cataluña y Madrid tienen razones para sentirse injustamente tratadas en su participación en los ingresos del Estado. Con la cesión del 15%, en cambio, Cataluña conseguiría gestionar automáticamente 114.771 millones de los 161.831 millones, que ahora recibe del Estado. Lo importante es gestionar, de entrada, la cantidad y no depender de las sistemáticas demoras del Estado.

Madrid también resultaría beneficiada con la cesión, aunque dirigentes del PSOE reconocen que esta comunidad recibe pocos fondos para hacer frente a los gastos de la capital del Estado. Madrid recibe unos 63.000 millones de pesetas y la cesión le permitiría gestionar automáticamente casi el doble, 125.234 millones.