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La 'década caprichosa' de Goya, a través de 27 retratos y 185 dibujos y aguafuertes

Se expone por primera vez el proceso completo de la creación de la serie de los 'Caprichos'

La Real Academia de Bellas Artes de San Fernando ha entregado tres espacios de su museo y de sus salas temporales a Francisco de Goya y Lucientes. La década de creación de la famosa serie de los Caprichos, con 27 retratos y 185 dibujos y aguafuertes, sirve para el montaje de dos exposiciones de importancia, que vienen a reflejar fielmente lo que constituyó una etapa de crisis en la vida del pintor y también en la sociedad española de finales del siglo XVIII. Las dos muestras se inauguran mañana, jueves, y permanecerán en cartel hasta, el próximo 10 de enero.

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El proyecto científico de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de estudiar y exponer la obra de Goya sigue con estas dos exposiciones, que, con el patrocinio de la Fundación Central Hispano, se han unido al programa del Madrid 92. Por primera vez se presenta al público español el proceso completo de la creación de la serie de los Caprichos, entre los años 1792 y 1804, cuyas planchas y la primera edición, de 1799, pertenecen a la Calcografía Nacional.

Retratos

En la primera planta del museo se han colgado los retratos, con 19 obras procedentes de instituciones y coleccionistas españoles y ocho de otros países. Una sala está dedicada a la aristocracia, en donde destacan los dos retratos de la condesa de Chinchón -uno de ellos, de la galería de los Uffizi de Florencia- y uno de la marquesa de Santa Cruz, del Louvre. En una segunda sala se han instalado los burgueses y amigos del pintor, como Villanueva, Jovellanos, Martín Zapater, Ceán Bermúdez, Martín Zapater, Meléndez Valdés. También figura el retrato de Asensio Juliá, que pertenece a la colección Thyssen-Bornemisza y que estuvo en la inauguración del museo.El comisario y autor del libro-catálogo de los retratos de Goya, el hispanista Nigel Glendinning, declaró ayer el momento excepcional de la pintura de Goya en los años noventa, en un momento de crisis personal a raíz de una sordera, y los cambios políticos, con el paso de la monarquía ilustrada y autoritaria de Carlos III a otra de mayor apertura con Carlos IV. "Goya llega al apogeo de su capacidad como pintor", señala Glendinning. "Significa un momento de intercambio entre el artista y el mundo que le rodea. En sus pinturas expresa la sociedad española y sus personajes, retratados con gran capacidad psicológica".

La investigadora Juliet Wilson-Bareau ha realizado la exposición y el libro-catálogo de los dibujos y aguafuertes, que se muestran en la sala de exposiciones temporales, en un montaje adecuado a la visión de los materiales artísticos.

En las diversas secciones (el autor de gesto satírico, el autor soñando, el engaño y la máscara, sueños y brujas" niños malcriados, vicios de los oficios, diabluras y brujerías, entre otras) se sigue la creación y la técnica de los Caprichos, con los dibujos previos, las pinturas, las pruebas de estado y el estado final. De las 110 pruebas de estado conocidas se exponen 35, y de ellas, 21 en estado final, y 12, sin terminar, junto con las dos únicas que existen en aguatinta. Se puede seguir también el rastro de algunos dibujos del álbum de Sanlúcar y del álbum de Madrid. En la sede de la Calcografía, en la instalación permanente del gabinete Francisco de Goya se pueden ver algunas de las 228 láminas de cobre de las cuatro series del pintor.

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