Los industriales deciden celebrar el aniversario del V-2 nazi
Portavoces de la industria aeroespacial alemana han anunciado que seguirán adelante con las conmemoraciones del 50 aniversario del primer lanzamiento, por el régimen nazi, de un cohete V-2 desde la localidad de Peenemünde, en la isla báltica de Usedom, para celebrar el comienzo de los viajes espaciales. Tanto el Gobierno de Bonn como los originarios patrocinadores de la idea, la Federación de la Industria Aeroespacial Alemana (BDLI), se distanciaron completamente del proyecto tras el alud de críticas que recibió.Un representante de la empresa aeronaútica y armamentística DASA, ahora parte del grupo Daimler Benz, pero que en tiempos del III Reich se aprovechó del trabajo forzado, era, en principio, el encargado de pronunciar el discurso. No obstante, ayer, la citada firma ordenó a su representante que no acuda al acto.
Las V2, tras ser experimentadas en Peenemünde, fueron posteriormente fabricadas en masa en el campo de concentración de Dora, en Turingia. Se calcula que más de 20.000 prisioneros, especialmente judíos y eslavos centroeuropeos, murieron trabajando en su construcción.
El Gobierno del canciller Helmut Kohl ve con desesperación que una mancha más va a caer sobre la imagen de Alemania, gravemente deteriorada en los últimos tiempos. Dieter Vogel, el portavoz del Gabinete, aseguró el lunes: "El canciller no supo nada, si lo hubiera sabido, lo habría prohibido". Pero Erich Riedl, subsecretario del Ministerio de Economía, que había aceptado apadrinar la celebración y pronunciar un discurso y que fue obligado por el Gobierno a cancelar su presencia, sigue defendiendo su postura.
