IU reclama que se congele el sueldo de los consejeros y se recorte gasto en altos cargos

El portavoz adjunto de Izquierda Unida en la Asamblea de Madrid, José Antonio Moral Santín, anuncia que su grupo parlamentario propondrá la congelación de las retribuciones de los miembros del gobierno de la Comunidad, que vienen a ganar algo más de siete millones de pesetas al año, lo mismo que un director general de la Administración central. "Sería una bonita muestra de solidaridad en tiempos de crisis", argumenta Moral.Al mismo tiempo, IU propone la concentración de algunas direcciones generales y la supresión de altos cargos en algunos departamentos, también como "medida ejemplar, cuando se anuncia un recorte salarial para los empleados públicos". De hecho, en la Consejería de Política Territorial está prevista una reorganización interna para reagrupar las actuales competencias del Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima) con dos direcciones generales. El Ivima pasará a dedicarse exclusivamente a la promoción de viviendas públicas.

La práctica paralización del crecimiento de la plantilla de la Comunidad de Madrid ya fue anunciada antes del verano por el consejero de Hacienda, Ramón Espinar, en una comparecencia ante la Asamblea de Madrid. En 1991, la Administración autónoma tenía más de 26.000 empleados, de los que sólo 7.000 tenían la condición de funcionarios. En total, en el organigrama de la Comunidad de Madrid hay un centenar de altos cargos.

La previsión de incremento salarial de los empleados públicos contenida en los Presupuestos Generales del Estado -un 12%- también se baraja para los trabajadores de la Comunidad de Madrid. El año pasado el capítulo de remuneraciones de personal experimentó un incremento del 7,2%.

Tradicionalmente, el Gobierno de Leguina aplica a las retribuciones básicas de sus trabajadores el incremento salarial fijado en los Presupuestos del Estado, pero mejora de forma sustancial sus retribuciones complementarias. En los últimos ejercicios, mediante homologaciones de puestos de trabajo, se ha equiparado el sueldo de los funcionarios autonómicos con los de otras administraciones.

Izquierda Unida advierte, no obstante, que, "no pactará un presupuesto en el que se produzca un deterioro de los salarios reales". En la práctica, esta reivindicación significa que la revisión salarial para 1993 no podrá estar por debajo de la inflación prevista para este año.