Renfe y el Gobierno aragonés acuerdan mantener líneas férreas deficitarias

Renfe y la Diputación General de Aragón han firmado este verano un convenio para garantizar el servicio ferroviario en corredores de baja ocupación a cambio de una subvención de la comunidad autónoma. El Gobierno aragonés pagará 130 millones de pesetas el primer año y esa cantidad incrementada con el IPC en la segunda anualidad de vigencia del convenio. Acuerdos semejantes se están negociando con la Diputación Provincial de Jaén, con la Junta de Andalucía, con la Comunidad de Murcia y con la Xunta de Galicia.

La compañía ferroviaria había advertido que reduciría o suprimiría hasta 22 líneas regionales de poca ocupación -menos de 50 pasajeros por tren- si las comunidades autónomas no subvencionaban el déficit (véase EL PAÍS del pasado 10 de junio). Durante la vigencia del contrato programa 1988-1991, era el Estado quien cubría las pérdidas de las líneas regionales, que por término medio ascienden al 60% del cóste de explotaclón. En la negociación de un nuevo contrato programa, el Estado ya ha dejado claro que no piensa seguir cubriendo este déficit.En el convenio con Aragón, Renfe se compromete a mantener dos servicios regionales diarios de ida y vuelta entre Jaca y Canfranc; a asegurar paradas en las estaciones de Fabara Nonaspe y Fayón-Puebla de Masaluca, con un servicio diario de ida y vuelta; a establecer un servicio regional ferroviario para mantener unidas las capitales aragonesas de Huesca Zaragoza y Teruel mediante la puesta en servicio de un tren transaragonés, con origen en Canfranc y destino final en Valencia, y a implantar los servicios Teruel-Zaragoza y Teruel-Valencia, en ambos sentidos. Estos últimos servicios habían sido suprimidos meses atrás. Estas líneas entrarán en vigor el 18 de octubre próximo o cuando Renfe implante su horario de invierno.

Renfe facilitará mensualmente a la Diputación General de Aragón 1.500 bonos de un viaje de ida y vuelta cada uno, que el Gobierno aragonés distribuirá entre centros juveniles, jubilados y escuelas para fomentar el uso del ferrocarril, pero válidos para los días valle (martes, miércoles, jueves y sábados que no coincidan con festividades nacionales, regionales o locales). Los trenes subvencionados por la Administración aragonesa lucirán el anagrama o bandera de esa comunidad autónoma.

Fuentes de la compañía ferroviaria destacaron el carácter novedoso de este convenio y destacaron que la conexión ferroviaria entre Zaragoza y Valencia resulta competitiva con la carretera, dado el mal estado de ésta. Renfe calcula que el viaje entre la capital aragonesa y Valencia se cubrirá en cinco horas y cuarto, y un poco más en la ruta en sentido inverso, porque es en subida.

Líneas rentables

Las mismas fuentes destacaron que las líneas regionales funcionan bien y tienen futuro cuando cubren corredores poblados y el servicio que se presta es de calidad. Así, en el pasado mes de agosto las líneas regionales batieron su marca histórica en cuanto a número de pasajeros transportados (2,4 millones, lo que supone el 25% más que en el mismo mes de 1991 descontando los efectos de huelgas y amenazas terroristas sobre las vías férreas de ese año). En julio fueron 2,2 millones los pasajeros de las líneas regionales, lo que supuso, un 15,7% más que en el mismo mes del año anterior. Las líneas regionales de 21 corredores y en torno a cinco ciudades transportan el 80% de los pasajeros usuarios de este servicio: Cataluña; una parte de Andalucía; Madrid-Valladolid-Palencia; Madrid-Ciudad Real; Vigo-Coruña, etcétera.Renfe negocia otro convenio con la Comunidad Murciana, que como novedad principal contempla la creación de un servicio diario y de ida y vuelta entre Cartagena y Murcia con Madrid sin paradas intermedias. Este servicio estaría pensado para los ejecutivos y empresarios murcianos que deben trasladarse a Madrid para sus negocios y que carecen de un enlace aéreo cómodo (hay que ir hasta Alicante para tomar el avión).

El tren saldría de Murcia a primera hora de la mañana para llegar a Madrid a horas de oficina, para represar a última hora de la tarde. El Gobierno murciano busca un par de espónsor que corra con los gastos de la subvención.