El cáncer de pulmón se incorpora a las enfermedades con terapia genética en Estados Unidos
La terapia genética, hasta ahora experimental y limitada a enfermedades hereditarias, va a empezar a aplicarse a enfermedades comunes. Un médico de Estados Unidos ha obtenido permiso para aplicar tratamientos con genes en algunos casos de cáncer de pulmón, el de mayor mortalidad en los países desarrollados.
El doctor Jack A. Roth, del Centro del Cáncer Anderson de Houston, recibió el pasado martes permiso del Comité Consultivo Federal sobre ADN Recombinante para tratar 14 pacientes que sufren un tipo fa tal de cáncer de pulmón denominado carcinoma de célula no pequeña, consecuencia a menudo del consumo de tabaco.El método que ha diseñado es original en la terapia genética, ya que se tata de un intento de, añadir moléculas que suprimen la actividad de los genes que se cree contribuyen al crecimiento desordenado de las células en el tumor. En la terapia genética normal, utilizada para enfermedades hereditarias, lo que sehace es dar a los pacientes nuevas copias de genes que les faltan.
El nuevo enfoque podría resultar eficaz en un amplio número de enfermedades causadas por trastornos en los genes, y no por su falta. En el cáncer se trataría de evitar la actividad de los genes que mutan, supuestamente por agresiones ambientales como el humo del tabaco, y cuyo efecto es una proliferación celular desordenada. El cáncer de pulmón de célula no pequeña es a menudo fatal, con una supervivencia entre los seis y los nueve meses cuando ya está en fase avanzada. Son estos pacientes los que tratará Roth. Primero quitará todo lo que pueda del tumor y determinará el tipo de mutación genética que lo ha hecho crecer, que será del tipo del gen K-ras o el gen p53.
Gen visto en el espejo
Roth actuará sobre el primero inyectando en los pulmones del enfermo, como vehículo molecular, un virus inocuo al que se ha añadido bioquímicamente un gen que es la imagen especular (vista en el espejo) del gen K-ras hallado en el tumor.El virus se infiltrará supuestamente sólo en las células cancerosas, las que se dividen rápidamente, y entonces se activará el gen añadido, que se espera se acople con su gemelo especular y lo neutralice. De esta forma, el tumor dejará de crecer.
Si se trata del gen p53, la estrategia será ligeramente distinta. Cada paciente recibirá en cualquier caso cinco inyecciones a través de un broncoscopio, lo que resulta un tratamiento molesto.
Roth cree que si la terapia resulta efectiva, aunque no salve las vidas de los primeros 14 enfermos para los que ha recibido permiso para tratarlos, se podrá utilizar en pacientes con este cáncer en fase inicial o con síndromes precancerosos de cáncer de tráquea.
[En España, el cáncer de pulmón es el de mayor mortalidad entre los hombres, con más de 10.000 fallecimientos en 1985 según datos oficiales. En mujeres es el quinto en mortalidad con 1.264 fallecimientos.]
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