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Decenas de televisiones en Italia se han convertido en emisoras 'piratas'

Anoche, a las doce, expiró el plazo para que seis televisiones privadas de cobertura nacional y 150 locales finalizaran sus emisiones y cerraran sus instalaciones. El pasado 13 de agosto, el Gobierno italiano dio el visto bueno a seis canales de televisión, (a los que hay que sumar los tres de la RAI). Los que no consiguieron entonces la concesión se han convertido hoy en emisoras piratas al continuar en funcionamiento.

"El domingo por la noche no mandaré a los carabineros a desenchufar. Pero que los interesados sepan, que desde ese momento, si continúan las emisiones, incurriran en consecuencias legales". Maurizio Pagani, ministro de Correos y Telecomunicaciones italiano, anunciaba así- anoche que no impondría mano militari la decisión gubernamental sobre concesiones televisivas, que desde la pasada media noche debería haber llevado al oscurecimiento de decenas de emisoras que no han obtenido licencia. Los afectados han optado por la guerrilla. El alcalde de Capri, propietario de TeleCapri, ha anunciado que se dedicará a descodificar Telepiú y a regalarla, a través de sus instalaciones, a los no abonados.

No se apagarán

No se sabe cuántas cadenas son ni cuál es su cobertura, porque con frecuencia no ha habido normas, ni siquiera laborales, y muchas han sido creadas en un momento determinado a favor de un personaje de relieve local sin presentar demasiados requisitos. Estimaciones aproximadas dicen que la proliferación salvaje de emisoras de televisión en Italia ha creado 15.000 puestos de traba o, muchos de los cuales desapareceran tras la asignación de frecuencias hecha por el Gobierno.El viernes, en la región de Brindisi, 70 emisoras locales de televisión hicieron una asamblea para decir no al ministro de Telecomunicaciones y calificar de falsas, ilegítimas y- condicionadas por lobbies ocultos las razones de su decisión. Los reunidos pidieron que la prórroga concedida hasta el próximo febrero a algunas emisoras se extienda a todas; señalaron que laavalancha de recursos y los peros que algunos partidos políticos han expresado ya contra la ley Mammi, que regula la televisión en Italia, podría llevar a aquélla hasta el tribunal constitucional. También anunciaron que no sólo combatirán en el Parlamento contra la conversión en ley del último decreto sobre la aldJudicación de frecuencias, sino que, en última instancia, llegarán a solicitar un referéndum para pedir su abrogación. Pero mientras, no oscurecerán las pantallas, no apagarán su señal.

En el encuentro del viernes se constituyó un comité permanente, que se reunirá el jueves próximo en Roma o en Bolonia, aunque alguno de- los presentes propuso Segrate, en Milán, cueva de la horca del éter, uno de los apelativos de Silvio Berlusconi. Pero no todas las protestas van a limitarse a no oscurecer las'señales o al recurso legal. Constantino Federico, alcalde de la isla de Capri y -propietario de ReteCapri, la primera excluida de las redes nacionales, ha anunciado que, de no prosperar sus recursos, boicoteará las transinisiones de Telepiú -que ha obtenido permiso transitorio- captando sus señales y descodificándolas, para que: puedan verlas los no abonados. El alcalde ha asegurado que preparará una serie de programas sobre Berlusconi y sus vinculaciones a la logia masónica Propaganda 2 de dicho Licio Gelli.

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