Una nueva colaboración para el Magreb
F.M., Los ministros de Exteriores de la CE perfilarán hoy las declaraciones de cooperación política que aprobará el próximo sábado la cumbre de Lisboa, entre ellas las ya obligadas sobre la paz en Oriente Próximo y Yugoslavia. La principal novedad es el nuevo marco de relaciones ofrecido al Magreb, en el que se contemplan una asociación basada en un acuerdo de libre cambio y una "ayuda financiera adecuada". Este último punto, defendido por España Y Francia, encuentra resistencia en algunos países, como el Reino Unido.
La base de este proyecto de declaración la constituyen tres borradores, presentados respectivamente por la Comisión Europea y los Gobiernos español y francés. El objetivo es otorgar a los países de la región mediterránea una prioridad similar a la reconocida por la CE a los países del Este. El argumento de Madrid es la bomba de relojería que representan para los Doce la explosión demográfica y la crisis económica, social y política de los países del Magreb. España es el punto de penetración de una inmigración ilegal y desesperada a través del Estrecho. "El flujo migratorio positivo en la Comunidad, a pesar de la suspensión oficial de la inmigración en casi todos los Estados miembros, es de unas 400.000 nuevas personas al año", afirma un informe del Ministerio de Asuntos Exteriores español. La declaración referida al Magreb va destinada exclusivamente a Marruecos, Argelia y Túnez, y excluye de manera tácita a Libia, mientras a Mauritania se la enmarca en la ayuda del Fondo Europeo de Desarrollo. El mensaje es "reforzar la solidaridad y dar estabilidad y prosperidad a la región".
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