González insinua que el relevo en Exteriores puede acarrear más cambios en el Gobierno

El presidente del gobierno, Felipe González, insinuó ayer que podría aprovechar la sustitución de Francisco Fernández Ordóñez al frente de la cartera de exteriores para introducir varios cambios en su gabinete. "no quiero cerrarme ninguna puerta ni abrir ninguna" dijo el jefe del ejecutivo en el congreso después de explicar que quería someter a la reflexión del consejo denfinistros del viernes la sucesión del titular de asuntos exteriores. también insistió en su idea esgrimida hace un mes de que aún no ha decidido si encabezará la candidatura socialista para las próximas legislativas.

Durante una conferencia de prensa en el Congreso, González fue muy impreciso sobre la fecha de la sustitución de Fernández Ordóñez y sobre el alcance de los cambios en el Ejecutivo. Sí puntualizó que el relevo no se realizará antes del próximo viernes porque no tenía un apresuramiento especial, ya que considera que "está bien cubierta la actividad en la cartera". "El propio ministro", agregó, "está al hilo de los acontecimientos y expresando su opinión, que sigo considerando extraordinariamente valiosa".Al ser interpelado sobre si introduciría mayores cambios en el Gobierno, González mantuvo el siguiente diálogo con los periodistas:

Pregunta. ¿Sigue pensando que no será una remodelación, un cambio de un ministro por otro?

Felipe González. No quiero cerrarme ninguna puerta ni abrir ninguna. Sólo en el momento en que se produzca la sustitución tendrán información. Creo que lo comprenden aunque yo también comprendo que ustedes insistan.

P. Entonces, ¿Habrá crisis?

F. G. Eso siempre es, ya lo saben, pase lo que pase siempre se llama crisis.

Pese a lo insólito de la decisión de González de someter a consulta de su Gobierno el nombramiento de un ministro, existe un precedente. En abril de 1990 consultó con el Consejo de Ministros la designación de Luis Martínez Noval como titular de Trabajo, en sustitución de Manuel Chaves, actual presidente de la Junta de Andalucía. El nombramiento fue dado a conocer ese día por la ministra portavoz, Rosa Conde.

González dijo también que no hay ningún factor determinante" para decidir la fecha del relevo, pero que, en todo caso, sería antes de la Cumbre de Lisboa, que se celebrará los días 26 y 27 de junio. El jefe del Ejecutivo confirmó que el martes no mantuvo el despachó habitual con el Rey. "Estaba ausente", se limitó a señalar. También manifestó que, en su entrevista de hora y media con Fernández Ordóñez el martes, encontró al ministro "más animado". "Mantuvimos una conversación muy animada y en algunos puntos divertida", señaló.

El jefe de Gobierno reiteró que no adelantará las elecciones legislativas, previstas para el otoño de 1993, y aseguró que aún no ha tomado una decisión sobre si encabezará el cartel del PSOE en esos comicios. "No es una decisión tomada. Tengo mucha pasión por lo que hago, como saben muy bien", dijo. Al ser interrogado sobre si había sentido la tentación de no presentarse, manifestó: "Esta tentación a veces la tengo..."