La huelga de autobuses ha terminado

La huelga de autobuses urbanos terminó. Los trabajadores decidieron ayer, en asamblea y por abrumadora mayoría, abrir una "tregua" con la dirección de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) y con los usuarios hasta que dentro de dos semanas se conozca la sentencia del magistrado que juzgó el martes a los 27 despedidos por organizar presuntamente el paro ilegal del 15 de enero. Este "paréntesis", "puerta" o "impasse" no fue fácilmente entendido ni por todo el comité de empresa (36 miembros) ni por toda la asamblea (más de 2.500 personas). La votación redujo los disidentes a 12.

Pablo Rodríguez, el secretario general y líder de la Plataforma Sindical, el sindicato mayoritario de la EMT, luchó ayer primero por la mañana para convencer a no menos de cuatro miembros del comité de empresa de que revocar la huelga era la actuación más inteligente" que en estos momentos se podía permitir este sindicato. Por la tarde también sudó, pese al aguacero que cayó sobre las cocheras, para reconducir la asamblea de trabajadores, que en alguna fase se mostró incluso esquiva."Hoy vamos a demostrar que somos partícipes y protagonistas de nuestro futuro", auguró Ramón Fernández, uno de los portavoces más históricos de la Plataforma.

Los asistentes al acto, al principio más que al final, cuando se votó, estaban entusiasmados ante los últimos acontecimientos: la masiva manifestación del lunes y lo que califican como favorable juicio del martes. El fervor también se aprecia en la caja de resistencia, que ayer se engordó con 496.954 pesetas de aportaciones de los últimos días.

Pablo Rodríguez, que dirigió en todo momento el desarrollo, nudo y desenlace de la asamblea, recordó primero que después de 66 días de huelga "no se puede pedir más sacrificio a los trabajadores", para justificar a continuación el acuerdo de anular los paros. "Estamos cansados y necesitamos relajarnos", dijo.

Negociar el convenio

Rodríguez pidió un compás de espera en los paros, por lo menos hasta que el juez se pronuncie, sobre el día 23 de abril, "para negociar con la empresa el convenio y tratar el tema de los otros despedidos [por la huelga actual ya se han firmado 25 sanciones más en este sentido] y el de los contratados no renovados".

"La lucha no se ha terminado", insistieron en repetidas ocasiones tanto Pablo Rodríguez como sus lugartenientes. El líder de la Plataforma entiende, además, que la decisión de anular los paros es oportuna, porque en los próximos días llegarán las vacaciones de Semana Santa, que calificó como unas fechas "sin trascendencia, en las que no tenemos que hacer nada".

Rodríguez no ocultó las diferentes posibilidades que pueden plantearse tras el conocimiento público de la sentencia sobre los 27 despedidos ya juzgados: "SI el juicio es favorable, entraremos como una moto en la EMT; si por casualidad no es así y se queda algún trabajador fuera, habrá que seguir luchando".

Los portavoces del sindicato recalcaron mucho su intención de suprimir la huelga para rebajar la presión "en la calle" sobre el magistrado hasta que dicte sentencia. Rodríguez lanzó incluso un guiño a los más de un millón y medio de usuarios que utilizan diariamente los autobuses municipales: "Así verán también los ciudadanos que en cuanto tenemos la más mínima oportunidad los autobuses circulan".

La asamblea tomó otro cuerpo cuando surgieron las voces críticas. Algunos trabajadores no se fían y prefieren continuar con el conflicto. "No hay pasos ni para atrás ni para un lado, no seáis de piñón fijo, esto es simplemente un pasito para coger más fuerzas en el caso de que sean necesarias", explicó el secretario general de la Plataforma.

"La empresa ya no va a tener la excusa de los piquetes en las puertas de las cocheras para poder negociar el convenio, y los miembros del comité podremos entrar en nuestros locales sindicales", amplió Rodríguez sus razones para acabar con los paros.

La dirección se alegró del acuerdo tomado por los trabajadores, pero no precisó que se vaya a sentar a negociar inmediatamente. Además, consideró "extraña la tregua" y apuntó que las resoluciones judiciales, o se acatan o se recurren.

El sindicato continuará editando, hasta la sentencia, su folleto Camina o revienta para informar a los trabajadores de sus avances en la negociación.

La anulación de la huelga será comunicada hoy a la Delegación del Gobierno y a la empresa. Los trabajadores, que votaron masivamente a favor de esta medida (se opusieron 12 personas y 4 se abstuvieron), no descartan movilizaciones u otras acciones si en estos días la dirección se muestra intransigente.