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La ONU alcanza un acuerdo global para desbloquear la Cumbre de la Tierra

Los representantes en la ONU de 160 naciones han llegado a un acuerdo genérico y sin compromisos concretos ni económicos que desbloquee las negociaciones preparatorias de la conferencia que este organismo ha convocado en junio en Río, la Cumbre de la Tierra. Los delegados internacionales han firmado un documento que pide a los países industrializados que ayuden a los más pobres a conseguir un desarrollo respetuoso con el medio ambiente. Los diplomáticos europeos ya prevén que el Tercer Mundo sólo logrará un 8% del dinero que necesita para ayudar a limpiar el planeta.

Este pacto genérico es el único resultado de las negociaciones que durante cinco semanas se han llevado a cabo en la ONU. Los enfrentamientos Norte-Sur sobre quién debe pagar el freno al progresivo deterioro medioambiental en la Tierra han sido el principal obstáculo para llegar a cualquier compromiso previo entre todos los participantes de Río 92, que pretende sentar las bases del desarrollo mundial en los años de transición del siglo XX al XXI.Sobre la plasmación real y concreta de esa solidaridad Norte-Sur, la creación de un fondo monetario mundial, no ha habido ningún acuerdo. Se calcula que el Tercer Mundo necesitará cada año alrededor de 125.000 millones de dólares (12,5 billones de pesetas) de ayuda externa para llevar a cabo la Agenda 21 de las Naciones Unidas (un plan para limpiar la Tierra en el siglo XXI). Esta cifra supone duplicar la ayuda que por todos los conceptos recibe en la actualidad el Tercer Mundo procedente de los países desarrollados. Cifras tan astronómicas han hecho que ningún país, de los 160 participantes en Río, haya querido adelantar lo que está dispuesto a aportar o los porcentajes de incremento en la ayuda que considera adecua dos. Varios diplomáticos europeos vinculados con Río estiman que todo lo que se conseguirá en la cumbre será un aumento de entre 3.000 y 6.000 millones de dólares; o sea, un 8% del aumento que los expertos calculan como necesario.

Erradicar la pobreza

El borrador redactado el sábado señala que la directriz principal de todas las conclusiones de Río ha de ser la erradicación de la pobreza "como requisito indispensable para un desarrollo sostenible"; o sea, respetuoso con la naturaleza. Los otros puntos principales son: "Quien contamina ha de cubrir los gastos para limpiar las áreas deterioradas", las mujeres tienen "un papel fundamental en la protección medioambiental" y "ninguna nación tiene derecho a causar daños en los sistemas ecológicos de otros Estados o de otras áreas que rebasen los límites de su jurisdicción nacional".Este documento critica, en términos generales, el propio desconocimiento de los países desarrollados respecto al daño causado por su industrialización y la responsabilidad que han contraído, al haber alcanzado niveles mayores de riqueza, con los países más pobres para mejorar las condiciones de vida en todo el mundo con fórmulas de desarrollo seguras para el medio ambiente.

El documento señala también que los países desarrollados deberán cooperar para "proporcionar conocimientos a través de intercambios científicos e incrementando el desarrollo, adaptación, transferencia y difusión de tecnologías, incluyendo las nuevas e innovadoras". La forma de llevar a cabo el traspaso de tecnología avanzada del Norte al Sur es otro de los grandes retos de la Cumbre de la Tierra, sobre el que estas conversaciones previas no han llegado a ningún compromiso.

Los delegados de los 160 países en el foro de las Naciones Unidas han huido, al final, de cualquier declaración más comprometida, ante las amenazas de diversos países de bloquear la cumbre de Río. Entre ellos, Estados Unidos amenazó con que el presidente George Bush no acudiría a la cumbre si no había garantías de que no llegar a conclusiones perjudiciales para los intereses norteamericanos. Israel se opuso frontalmente a una referencia a la protección de los recursos naturales de los "pueblos que viven bajo la opresión, dominación u ocupación", por entender que esas afirmaciones constituían intoxicación política de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) y de los países árabes. Países como Malaisia y la India han hecho hasta ahora oídos sordos a las llamadas internacionales sobre su responsabilidad para preservar sus importantes áreas forestales, vitales para evitar los cambios climáticos.

Francia ha anunciado para finales de abril la convocatoria en París de una reunión entre algunos de los países clave en Río para intentar llegar a compromisos más fuertes.

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