La calidad del agua y la desertización, principales retos en España, dice Borrell

El ministro de Obras Públicas, José Borrell, considera que los principales problemas medioambientales de España son la calidad del agua y la desertización del suelo. Borrell hizo estas afirmaciones ayer en el centro de El Acebuche, en el parque nacional de Doñana (Huelva), durante la conferencia sectorial de medio ambiente, a la que asisten los 17 consejeros de las comunidades autónomas. Esta reunión, que continuará en Sevilla los días 5 y 6 de abril, tiene como objetivo coordinar las políticas conservacionistas en España. La falta de estrategias comunes ha sido una de las principales críticas que han llegado desde organizaciones ecologistas y desde la Comunidad Europea.Borrell subrayó que "los problemas hídricos del coto de Doñana, pese a la sequía, no son más graves que los que presenta el conjunto del país", y reconoció que el ministerio desconoce el impacto de las aguas no reguladas en los recursos hídricos. "Para subsanar este asunto", continuó Borrell, "estamos elaborando el llamado Libro blanco de la contaminación del agua, para conocer con exactitud en qué medida es importante el problema de la depuración del agua en España". El ministerio elabora actualmente un programa para el control de aguas residuales, actualmente muy deficiente en municipios de menos de 10.000 habitantes, que prevé unas inversiones totales de un billón de pesetas.

Para el ministro, el respeto a la calidad de las aguas es cuestión "de actitud", "de disciplina de los ciudadanos, pues ese asunto se halla lo suficientemente legislado, tanto por las leyes españolas como por las comunitarias". Borrell calificó de "positivo" que el nuevo Código Penal contemple un incremento de las penas por delitos ecológicos. "La política de medio ambiente cada día tiene más importancia en Europa", señaló Borrell.