El futuro reglamento del CSIC desata una nueva crisis interna

El futuro reglamento interno del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), conocido a principios de año, ha provocado una nueva crisis en este organismo, que cuenta con 2.000 investigadores. Su presidente, Elías Fereres, cree que el reglamento es un asunto "ni crucial ni trivial", y que así lo estima la mayoría del personal. Pero 500 investigadores lo rechazan porque supone la disminución del rango administrativo del vigente reglamento, de 1978, la equiparación de su presidente con un director general del Ministerio de Educación y menor participación en la gestión del organismo.

Los sindicatos UGT y CC OO esgrimen argumentos similares para rechazar el proyecto de reglamento, cuyo marco jurídico creen peligroso. Se trata de un decreto breve, que deja todas las cuestiones específicas, incluidas la existencia o no de los institutos de investigación que forman el CSIC, pendientes de las órdenes ministeriales posteriores.Una fórmula interesante por flexible, según Fereres, pero inaceptable para muchos en el CSIC. Ya han comenzado las negociaciones en forma de grupos de trabajo abiertos para la elaboración rápida de dichas órdenes. Tras su debate en los centros, los textos se aprobarán previsiblemente de forma simultánea con el decreto del reglamento. También se incluirán en el decreto original la existencia de los institutos y su funcionamiento.

Tres avances resalta Fereres, presidente del CSIC desde hace menos de un año, en su valoración del nuevo reglamento: el fortalecimiento de la junta de gobierno del CSIC, la creación de una estructura de apoyo y planificación científica más sólida para la junta de gobierno y los institutos y el refuerzo del papel del director de cada instituto, que seguirá siendo elegido por votación popular, pero tendrá más capacidad ejecutiva. También habrá un consejo rector, con participación de los sectores sociales, similar al consejo social en las universidades.

Fereres opina que el personal del CSIC tiene que darse cuenta de que su peso en la ciencia española es menor ahora que hace 15 años, ya que ha aumentado mucho la investigación en. la Universidad. La dependencia del ministerio no cambia, según él, porque en la práctica ya existía.

La contratación temporal se va a introducir en el CSIC como medio imprescindible, según Fereres, de evitar la injusta situación de los llamados becarios posdoctorales y hacer de puente hasta la obtención de plazas en propiedad. La convocatoria de unas 100 plazas de contratados temporales se hará en abril para doctores con experiencia posdoctoral, preferiblemente en el extranjero, y también para extranjeros. Existen áreas con atasco de científicos formados, según el presidente del CSIC, como en biología molecular y biología, pero hay otras en las que existe déficit, dado el escaso número de candidatos a algunas de las actuales plazas de colaborador que se están dilucidando.

Otro tema que suscita críticas es el presupuesto y la captación de fondos ajenos al organismo. El presupuesto es justo pero adecuado este año, a pesar de las reducciones, según Fereres. En cuanto a que los investigadores capten fondos de programas internacionales o del Plan Nacional de Investigación para poder llevar a cabo un trabajo científicamente relevante, el presidente del CSIC lo tiene claro: "Hay que establecer mecanismos para que la ciencia básica no sufra, pero en las demás áreas, si un investigador no sabe vender la idea de lo que quiere hacer es que esa idea no vale la pena y no debe ser apoyada".

Centro de Biotecnología

El CSIC quiere potenciar la figura del director de instituto como orientador de las líneas de trabajo de los investigadores, de forma que se pase del proyecto individual a los proyectos conjuntos con un enfoque multidisciplinar y una masa crítica suficiente. Entre los institutos en el buen camino, en su opinión, Fereres cita los de Automática Industrial y Cerámica y Vidrio, de Arganda (Madrid); el de Materiales., de Barcelona, y el de Agroquímica y Tecnología de los Alimentos, de Valencia. Sin contar los grandes, como el Centro de Biología Molecular y el Centro de Investigación y Desarrollo.Sobre el retraso de más de tres años en la puesta en marcha del Centro Nacional de Biotecnología, Fereres habla del verano para su comienzo y de la incorporación del biólogo Mariano Esteban como nuevo director en otoño.