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Un autor inédito gana el Anagrama de ensayo con una obra sobre el ingenio

José Antonio Marina, de 52 años, es catedrático en un instituto de Madrid

Elogio y refutación del ingenio, de José Antonio Marina (Toledo, 1939), resultó ganadora ayer, por unanimidad del jurado, del 20 Premio Anagrama de ensayo. El autor, catedrático de Filosofía en un instituto de Madrid, es especialista en Teoría de la Inteligencia y no había publicado ningún libro hasta ahora. "Creo que el hombre es un animal más ingenioso que racional", manifestó Marina, "y por eso he escrito un libro sobre el ingenio".

"Programar un ordenador para que entienda un chiste es sumamente complicado, mientras que la inteligencia artificial es relativamente fácil de conseguir", manifestó ayer en rueda de prensa José Antonio Marina para ilustrar la frontera que separa inteligencia de ingenio.En cualquier caso, quedó claro que a Marina, especialista en inteligencia, le interesa más que nada el ingenio, quizá porque, como él mismo dice, "el estudio de la inteligencia me ha llevado de sorpresa en sorpresa en los últimos 25 años".

Al jurado del premio Anagrama de ensayo -formado por Román Gubern, Fernando Savater, Xavier Rubert de Ventós y Salvador Clotas- también le interesaron las ideas de Marina, como lo prueba que acordaran ayer otorgarle el premio por unanimidad. Finalistas fueron Pedro Azara (París, 1955), que ya lo fuera hace dos años, y Sergio González Rodríguez (México, 1950).

Cuando se le pregunta a Marina por qué ha escrito sobre el ingenio, responde: "Pues porque creo que la definición del hombre como animal racional es estrecha y creo que es más bien un animal ingenioso. La razón se basa en conceptos definidos, mientras que la inteligencia ingeniosa funciona con conceptos borrosos y lógicas inventivas. La razón puede ser simulada por la inteligencia artificial, pero el ingenio no. ¿Cómo programar a un ordenador para que entienda un chiste es sumamente complicado?".

En Elogio y refutación del ingenio, José Antonio Marina repasa lo que supone el ingenio en las distintas facetas de la vida. En la economía por ejemplo -"Ibercorp es un caso típico de ingenio metido en las finanzas"- o en el mundo del arte. "Con el ingenio", afirma, "el ser humano busca burlar lo que le oprime. Y un ejemplo son los chistes".

Sobre el arte moderno, al que dedica un capítulo especialmente brillante de su libro, manifestó Marina: "Me he divertido mucho con el arte moderno, hasta reírme a carcajadas, porque gran parte del arte moderno hay que verlo como una enorme broma en la que el ingenio juega un papel primordial".

Marina desenmascara en su libro los peligros del ingenio. "Llega un momento que gira sobre sí mismo", afirma, "y se hace aburrido. Es como el chistoso, que al primer chiste hace gracia y cuando lleva mil ya aburre".

Marina citó en este sentido los peligros del ingenio aplicado al arte, que puede convertirse "en algo que cansa, en una monotonía repetitiva que aburre hasta a las ovejas".

José Antonio Marina inicia la obra ganadora del Anagrama con un test que permite al lector darse cuenta de que en el fondo de su inconsciente semántico mantiene, desde siempre, una teoría completa sobre el ingenio.

Marina defiende la teoría de que el ingenio es esencialmente un proyecto de la inteligencia para vivir jugando, a salvo de la lógica, de la moral y de la realidad. "El ingenio se mueve en la transgresión", apuntó ayer, "y es por tanto una diablura, pero no una maldad".

El editor de Anagrama, Jorge Herralde, se felicitó de que el 20 aniversario del premio haya recaído, por unanimidad, en un autor absolutamente deconocido hasta ahora.

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