Informe fiscal: faltan medios y sensibilidad

Los 19 apretados folios del informe elaborado por el Consejo Fiscal con un destinatario -el presidente del Gobiernoy un correo -el ministro de Justicia- dan cuenta de la penuria de medios del Ministerio Fiscal para cumplir su misión y denuncian la escasa sintonía y sensibilidad del Ejecutivo hacia las necesidades de la fiscalía. He aquí algunas quejas:Insuficiencia de plantillas. "Ante el progresivo aumento de órganos judiciales", no se ha producido "un crecimiento simultáneo y proporcional" de la carrera fiscal, lo que "impide que los fiscales puedan ejercer plenamente sus funciones".

Autonomía presupuestaria. La autonomía funcional del Ministerio Fiscal exige que los poderes públicos le otorguen suficiente autonomía presupuestaria que le evite depender "de la benevolencia del Consejo General del Poder Judicial y del Ministerio de Justicia" -este último, con competencias dispersas entre varias direcciones y subdirecciones generales- para cursos de formación y reciclaje.

Irregularidades y retrasos. Justicia no ha contado con el fiscal general para nombramientos en los que le corresponde la iniciativa, ha retrasado injustificadamente otros, no se han cubierto plazas para no generar "déficit presupuestario", las fiscalías carecen de espacio y de sistema informático eficaz, no se oye a los fiscales en reformas legislativas.

Oposiciones y formación. El sistema de selección no atiende las propuestas de los fiscales y la dilación en la convocatoria de oposiciones limita los recursos humanos. Las primeras previsiones sobre formación, incluidas en los Presupuestos del Estado para 1992 "son notoriamente insuficientes".