Kraus acusa al hermano de Caballé de propiciar una mafia operística

La polémica entre los cantantes de ópera españoles se recrudeció ayer durante un debate radiofónico en el que participaron Alfredo Kraus y el agente artístico Carlos Caballé, hermano de la soprano Montserrat Caballé. Kraus acusó a Carlos Caballé, representante de su hermana y de José Carreras, de propiciar una mafla que controla los circuitos de ópera en España desde hace muchos años.

"Siempre has llevado tu escudería, y el teatro del Liceo, Madrid o Canarias siempre han tenido que pasar por ella", interpeló Kraus a Carlos Caballé en conversación telefónica emitida ayer por la cadena de radio Onda Cero. Kraus se refería al grupo de cantantes al que representa Caballé, entre los que se cuenta su propia hermana y José Carreras, con quien el tenor canario mantiene un litigio desde que fue excluido de la inauguración de los Juegos Olímpicos.Kraus dijo claramente a Caballé: "En España existe una mafia cultural desde hace muchísimos años, gracias a tu organización y de la que ahora se están haciendo copias", en alusión a otras acusaciones ya formuladas por Kraus de que la Expo de Sevilla constituía también una mafia y que en Madrid se estaba gestando otra. "Si no te gusta la palabra mafia, hablaremos de monopolios: grupo musical cultural controlado", dijo. Añadió, sin embargo, que son grupos de control "con aspecto de sectas que se protegen a sí mismos e impiden el acceso a los demás".

Alfredo Kraus repitió que Carreras y Domingo no tenían que haber aceptado asesorar acontecimientos públicos como la Olimpiada Cultural o la Exposición de Sevilla. "Es necesario que separen el límite de su propia actividad porque es un abuso de poder el que un señor que es cantante activo dirija musicalmente y pueda discriminar: éste sí, éste no", concluyó Kraus, para quien este tipo de discriminaciones no se pueden realizar con dinero público. "Si fuese una empresa privada, no tendría nada que decir".

El tenor canario aseguró que está dispuesto a hablar de esta polémica con José Carreras, pero no a pedirle perdón, porque no se siente culpable de nada. "Lo que le pasa es una pataleta de niño mimado", continuó, "tengo derecho a una opinión libre".

Carlos Caballé rechazó todas y cada una de las acusaciones de Alfredo Kraus y le exigió excusas. Respecto a la exclusión de la Olimpiada del tenor canario añadió: "Se puede sugerir a Kraus y le aceptarían encantados en muchos sitios, todo depende de si entra en el esquema".