Bailarines del Ballet Lírico convocan una huelga para la próxima semana

Miembros del Ballet Lírico Nacional han convocado una huelga para el lunes 28 y el martes 29 de diciembre en protesta por lo que consideran una discriminación por parte de su director, Nacho Duato. Los convocantes repartieron el pasado lunes, durante la representación del Ballet en el Teatro de la Zarzuela de Madrid, una octavilla bajo el título: Ni Lírico, ni Clásico, ni Nacional, en la que se denuncian "la violación sistemática de los derechos laborales y la manipulación informativa en perjuicio de los bailarines". La huelga anunciada coincide con los dos últimos días de actuación en el teatro de la Zarzuela de Madrid, donde la compañía oficial presenta dos programas desde el pasado día 13.Las razones de esta huelga, según los convocantes, son la discriminación de gran parte de la plantilla, a la que el director Nacho Duato no considera con suficientes aptitudes para salir a escena: "Diecinueve bailarines en escena y 35 en el banquillo", denuncia la octavilla repartida.

Otra de las razones esgrimidas por los bailarines convocantes del paro dentro de la única compañía nacional clásica es la "monopolización del estilo coreográfico y la degradación humana y artística por la gloria de Nacho Duato". Los convocantes atribuyen la máxima responsabilidad de esta situación al director general del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM), Juan Francisco Marco. Este periódico intentó ponerse en contacto el martes pasado con alguno de los responsables del Ministerio de Cultura y con la dirección del Ballet Lírico Nacional sin conseguirlo.

Problemas laborales

El Ballet Lírico atraviesa problemas laborales desde que Nacho Duato se hizo cargo de su dirección en noviembre de 1989. El director trasladó al Ministerio de Cultura la solución al problema de varios miembros de la compañía que no consideraba útiles. Por el convenio colectivo firmado antes de la llegada de Duato, los bailarines gozan en el Ministerio, de Cultura de una contratación laboral fija, en contra de la norma que rige en la mayoría de las compañías internacionales, donde sus miembros son contratados por un periodo de dos años como máximo.La situación planteada por Duato ha dado lugar desde entonces a numerosos despidos, algunos ya resueltos como improcedentes en Magistratura de Trabajo. El malestar de algunos de los bailarines está incidiendo negativamente en la marcha de la compañía.