Las cinco repúblicas asiáticas deciden sumarse a la nueva Comunidad de Estados Independientes

Las cinco repúblicas asiáticas de la antigua URSS, todas ellas con mayoría de población musulmana, decidieron ayer sumarse a la Comunidad de Estados Independientes (CEI), creada el domingo por las repúblicas eslavas de Rusia, Ucrania y Bielorrusia. Con esta decisión se puso punto final a toda posibilidad, por remota que fuera ya, de construir el Estado confederal que propone Mijaíl Gorbachov. Una de las condiciones que ponen es integrarse como miembros cofundadores.

Tras esfumarse la última baza que le quedaba a Mijaíl Gorbachov de jugar un papel mediador, los rumores de dimisión del líder soviético han crecido más si cabe.Yeltsin volvió a demostrar ayer que es el interlocutor privilegiado con el exterior al conversar telefónicamente con el presidente norteamericano, George Bush, por segunda vez en cinco días. Ambos "intercambiaron puntos de vista sobre los acontecimientos que se están desarrollando en Rusia y el conjunto del país", según la agencia Tass.

El pulso que Gorbachov ha tratado de mantener esta semana con Borís Yeltsin y sus aliados lo ha perdido, pero eso no quiere decir que el camino hacia la constitución real y el desarrollo de la CEI esté ya expedito. El acuerdo ha sido ratificado por los Parlamentos ruso, ucranio y bielorruso, pero no sin que se hayan introducido enmiendas relevantes, como la propuesta de Ucrania de que sea posible crear Ejércitos propios dentro del marco defensivo común.

Las repúblicas asiáticas -Kazajstán, Uzbekistán, Turkmenistán, Tayikistán y Kirguizistán- tampoco entran en la CEI sin plantear problemas. La calidad de miembro cofundador que había sido ofrecida a Kazajstán, que junto a los tres Estados eslavos dispone de armamento nuclear, ha sido finalmente solicitada por las cinco. En correspondencia con ello, la declaración conjunta que hicieron ayer los presidentes de esas repúblicas, tras reunirse en Ashjabad (Turkmenia), plantea que todos los ex miembros de la URSS "deberían participar en condiciones de igualdad en la preparación de decisiones y documentos relacionados con la CEI".

En su calidad de repúblicas deprimidas, dentro incluso de la media de la ex URSS, reclaman que los acuerdos reflejen su "realidad histórica, social y económica", y se lamentan de que "desgraciadamente no se hayan tenido en consideración en la preparación del acuerdo". En otro punto los presidentes asiáticos, después de destacar la importancia que tiene incorporar a Ucrania, dicen también que el pacto Ies cayó por sorpresa". El presidente de Kazajstán, que parecía el lunes que podía alinearse con Gorbachov, dijo ayer que la posición que mantiene el presidente soviético "no tiene nada que ver con la realidad". Los presidentes eslavos visitarán Alma Atá (Kazajstán) el día 21 para reunirse con los presidentes de las repúblicas asiáticas y sellar su incorporación a la CEI.

El tránsito de la vieja a la nueva legalidad tampoco se presenta fácil. La suspensión de las leyes de la Unión en los territorios de las tres repúblicas firmantes ha sido corregida por el Parlamento de Rusia para evitar el vacío legal: la legislación soviética se aplicará en todo aquello que no contradiga las leyes rusas.