La familia Maxwell, en suspensión de pagos

Los herederos de Robert Maxwell pusieron ayer su fortuna personal, calculada en abril en 200.000 millones de pesetas, en manos de administradores judiciales. La medida, equivalente a una suspensión de pagos, fue tomada para evitar que los bancos acreedores forzaran hoy la quiebra del imperio Maxwell. La investigación oficial sobre el fraude en los fondos de pensiones del Grupo Mirror ha revelado que la cantidad sustraída puede superar los 80.000 millones de pesetas.

El escándalo Mirror, que amenaza las pensiones de jubilación de más de 9.000 trabajadores del grupo periodístico y de otros 8.000 de otras empresas dependientes de Maxwell Communication Corporation (MCC), ha conmocionado a la sociedad británica.El Gobierno ha anunciado que este mismo mes llevará al Parlamento una ley que establecerá rígidos controles sobre estos fondos y prohibirá que inviertan más del 5% de su dinero en activos vinculados a la compañía promotora. La Cámara de los Comunes celebrará la semana próxima un debate sobre la desastrosa herencia dejada por Robert Maxwell, muerto el 5 de noviembre en aguas de Canarias.

Los hermanos Ian y Kevin Maxwell dijeron ayer que la suspensión de pagos era inevitable, ya que no habían logrado reunir los 400 millones de libras (unos 70.000 millones de pesetas) que los bancos acreedores exigían para hoy. El objetivo, según Ian Maxwell, es "estabilizar en lo posible la posición de los empleados en las compañías del grupo, reducir el pánico e impedir que los bienes del grupo sean bloqueados judicialmente en otros países".

Las empresas bajo control judicial son las sociedades de cartera Headington Investments y Robert Maxwell Group, tenedoras de prácticamente todas las acciones y bienes de los Maxwell, con ramificaciones en paraísos fiscales como Gibraltar y Liechtenstein.

El juez nombró como administradores a John Talbot, Tony Brierley, Murdoch McKillop y Martin Fishman, de la sociedad auditora Arthur Andersen. Los nuevos gestores han anunciado que cooperarán con la Oficina de Fraudes y la policía de la City de Londres, que investigan los presuntos delitos cometidos en los fondos de pensiones por el fallecido magnate y sus colaboradores.

Los 6.000 pensionistas y 3.000 cotizantes del Grupo Mirror presentaron ayer una querella criminal contra los autores del fraude y exigieron que el dinero que falta "sea localizado y devuelto a sus propietarios". Mike Gallemore, director del periódico Sporting Life y uno de los administradores del fondo de pensiones del Grupo Mirror, explicó que "los abogados y asesores financieros siempre aseguraron que todo estaba en orden".

Cierre de 'The European'

Sin embargo, el diputado Rupert Allason afirmó que el Ministerio de Comercio e Industria sabía desde hace un año que había problemas en el Fondo Mirror y había realizado una investigación secreta.Los últimos acontecimientos hacen inevitable la venta de todas las empresas del antiguo imperio Maxwell. Los hermanos Maxwell admitieron ayer que incluso los periódicos Mirror, la joya del grupo, cambiarían de propietario, aunque el agujero descubierto en los fondos de pensiones reduce su atractivo como inversión. El magnate australiano Kerry Packer, el grupo alemán Bertelsmann y la empresa editora del dominical londinense The Observer son vistos como compradores. En cuanto al semanario The European, Ian Maxwell ha anunciado a los trabajadores que el cierre es prácticamente seguro y que el número que aparece este fin de semana será el último. El consejo de administración de este semanario mantuvo anoche una reunión de crisis.

Mientras, el diario neoyorquino Daily News, adquirido por Robert Maxwell a principios de año, se acogió ayer a la ley de quiebras, "para protegerlo de la incertidumbre creada por los acreedores de la familia Maxwell en el Reino Unido, así como para garantizar su supervivencia", según un portavoz del rotativo, informa Reuter.