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La CE busca armonizar los criterios para la admisión de inmigrantes

Isabel Ferrer

La integración de los extranjeros que residen en la Comunidad Europea (CE), la lucha contra la inmigración ¡legal y las solicitudes fraudulentas de asilo político ocuparon ayer la primera jornada de la reunión semestral de los responsables de inmigración y los ministros de Justicia e Interior de los Doce, el llamado Grupo de Trevi. Reunidos en La Haya, los representantes comunitarios perfilaron el informe que incluirá dichos extremos y será elevado a la cumbre de Maastricht los próximos 9 y 10 de diciembre. El texto enfocará de forma amplia los problemas derivados de la llegada de extranjeros y las posibilidades de armonizar, para 1993, los requisitos que decidirán o no su estancia.El informe que llegará a Maastricht ha sido elaborado por el grupo dedicado a la inmigración en el marco de la presidencia holandesa de la Comunidad. El trabajo tratará de ampliar el enfoque dedicado a dicho tema involucrando a departamentos como Asuntos Exteriores y Ayuda al Desarrollo. Con ello se intentará colaborar en la mejora de la situación económica de las zonas que arrojan mayores índices de emigración hacia Europa. Los países de Europa central y del Este y el norte de África aparecen entre ellas.

Los representantes de los Doce se mostraron ayer dispuestos a favorecer la integración de los casi diez millones de extranjeros que residen ya en la CE. A cambio, la lucha contra la inmigración ¡legal deberá ser común porque es ella la que amenaza el propie intento integrador. En definitiva, la Comunidad espera acoger sólo a los que sea capaz de integrar.

En cuanto al problema de los asilados políticos, la CE espera armonizar las normas que regulan sus solicitudes a partir del 1 de enero de 1993. No es que pretenda recortar sus políticas de asilo o estrechar los actuales canales de admisión. Sí rechazará, sin embargo, a los llamados asilados económicos, que no huyen de sus países por motivos políticos, pero se escudan en ese problema para intentar obtener un estatuto de refugiado. En la reunión de ayer se puso de mánifiesto que la presencia masiva de este tipo de asilados es una de las llamas que aviva el fuego de la xenofobia y el racismo que ha prendido en algunos países comunitarios en los últimos meses.

Para hoy está previsto que los ministros discutan los límites de la cooperación en materia policial y de lucha contra el crimen y la delincuencia, así como la posible formación de un cuerpo de policía europeo.

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