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Japón promete más apertura comercial pero seguirá protegiendo el arroz

El secretario de Estado norteamericano, James Baker, pidió ayer a Japón que asuma una mayor responsabilidad como líder político mundial y que abra su mercado a los productos extranjeros. En el segundo día de su estancia en Tokio, Baker solicitó alGobierno de Kiichi Miyazawa que abandone el proteccionismo que ha disparado el excedente comercial nipón y suscitado las iras de Washington y de la Comunidad Europea. Las peticiones del jefe de la diplomacia estadounidense han topado con una tibia respuesta nipona.

Las peticiones con respecto a la apertura del mercado del arroz también han obtenido escaso éxito. Míyazawa respondió a las demandas de Baker con el reconocimiento de que es preciso solucionar el problema del arroz no bilateralmente con Estados Unidos, sino dentro de la Ronda -Uruguay del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT), y prometió "más flexibilidad", aunque reiteró que es un "problema difícil".Pocas horas antes, el canciller Michio Watanabe había prometido "estudiar medidas para fomentar el libre comercio", tras reiterar que Japón no levantará la prohibición sobre las importaciones de arroz.

Respecto a las conversaciones comerciales de la Ronda Uruguay del GATT, Baker pidió más flexibilidad a Japón para que esta reunión concluya con éxito antes de fin de año.

Baker acusó a la industria nipona del automóvil de ser responsable del 75% del excedente comercial japonés frente a Estados Unidos, que en 1990 se calculó en unos 38.000 millones de dólares (unos cuatro billones de pesetas).

Miyazawa replicó que Japón busca soluciones al desequilibrio comercial que faciliten los intercambios bilaterales, entre ellas, fomentar las compras de repuestos de automóviles fabricados en Estados Unidos y las importaciones de automóviles extranjeros.

Relaciones internacionales

Sobre las relaciones internacionales, Baker afirmó que Japón debe convertirse en un "líder mundial" no sólo en el terreno económico, sino en la lucha por la democracia, los derechos humanos y la abolición de armamento nuclear.

Según el político estadounidense, las relaciones de Japón con Estados Unidos deben cimentarse en cuatro puntos básicos: el tratado de seguridad, una política económica "abierta por ambas partes", el cumplimiento de la promesa de "cooperación global" y el entendimiento mutuo de ambas culturas.

Washington propuso que Japón sea uno de los cuatro países que participen en la cumbre de paz para las dos Coreas y que medie en la desnuclearización de Corea del Norte, el desarme de China y la reconstrucción de Camboya, a lo que Tokio reaccionó positivamente. Con respecto a Camboya, Estados Unidos ha prometido costear el 30% de los gastos que las Naciones Unidas tengan en el proceso recién iniciado. Baker pidió a Japón una contribución económica similar, así como recursos humanos.

Por lo que respecta a Vietnam, Baker explicó a su interlocutor la progresiva normalización de relaciones y pidió ayuda para la recuperación económica del país. El canciller nipón felicitó a Baker por sus esfuerzos en el acercamiento árabe-israelí en la cumbre de Madrid, celebrada hace diez días en la capital española.

Hoy, martes, Baker se desplazará a Seúl para asistir a una reunión ministerial de la Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) y posteriormente visitará Pekín.

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