Encontrados carnívoros fósiles de doce millones de años al sur de Madrid

Un importante yacimiento de carnívoros fósiles ha sido localizado en el cerro de los Batallones, en el término municipal de Torrejón de Velasco (al sur de Madrid, cerca de Valdemoro). Se están desenterrando decenas de animales vertebrados de hace 12 millones de años. Los especialistas del Consejo Superior de Investigaciones Científicas hablan ya de un descubrimiento espectacular, visitado, por el momento, por expertos del Museo Nacional de Historia de París y del Instituto de Investigaciones Geológicas de Utrecht.

Hasta la fecha han sido desenterrados restos de un Gomphotherium angustidens (mastodonte), dos Hipparion primigenium (caballos primitivos), dos Pseudaelurus (panteras), cinco Paramachairodus (felinos), tres Machairodus aphamistus (tigres diente de sable), dos Amphicyon castellanus (osos primitivos) y fragmentos de esqueletos de primitivos rinocerontes, jabalíes, tortugas gigantes, conejos y ratones.Todos estos animales vivieron en el periodo denominado valleniense inferior, hace aproximadamente 11 millones y medio de años. Esta época, una de las menos conocidas por los científicos, coincide con un importante proceso de renovación de la fauna carnívora. En este yacimiento se entremezclan formas arcaicas, como los Amphicyon, con depredadores altamente especializados, hienas y tigres diente de sable. Estructuras óseas completas de especímenes de ambos grupos están viendo de nuevo la luz.

El estado de estos osarios es calificado por los investigadores del Museo Nacional de Ciencias Naturales como excepcional. Se han extraído esqueletos de machos, hembras y crías perfectamente conservados.

De gran parte de estos animales sólo se tenían datos de su dentición, ignorándose la morfología exacta del resto de sus huesos.

Terreno de charcas y fango

Jorge Morales, jefe del departamento de Paleobiología del Museo Nacional de Ciencias Naturales, afirma que "este yacimiento nos permitirá conocer animales miocénicos de los que apenas se tenía información en el mundo. Se trata de un periodo muy interesante porque coincide con la mayor diversidad de carnívoros de la historia. Unos estaban a punto de extinguirse y otros comenzaban su evolución"'.Se barajan diversas hipótesis para explicar la acumulación de tantos depredadores en un lugar tan concreto. Posiblemente, la zona fuera un terreno de charcas y fangos en donde quedaban atrapados los herbívoros. Los animales agonizantes atraían a los carnívoros, que, a su vez, morían entre los Iodos.

Por el momento, sólo se ha excavado una superficie de 12 metros cuadrados por cuatro de profundidad, aunque las proporciones del yacimiento pueden ser mayores.

Los primeros trabajos comenzaron el pasado mes de julio, cuando la compañía minera Tolsa encontró el yacimiento al efectuar prospecciones de sepiolita. Actualmente la empresa comparte terreno y maquinaria con media docena de investigadores.

Las piezas encontradas serán estudiadas y restauradas durante los próximos meses. La mayoría serán expuestas en museos dependientes de la Comunidad de Madrid. "Aunque la magnitud del hallazgo puede alargar los trabajos", añaden los expertos.