Arafat se alinea con los duros y critica la reunión de Madrid

El presidente de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Yasir Arafat, pronunció ayer en Túnez un virulento discurso contra Israel y criticó las condiciones en que se desarrolla la cumbre de Madrid, en línea con la actitud del frente de rechazo ante la conferencia. Arafat efectuó estas declaraciones en la apertura en Cartago de la I Confetencia Internacional para la Defensa del Pueblo Palestino, organizada por la Liga Tunecina de Derechos Humanos."Hemos ido a Madrid, aceptando las condiciones previas impuestas por Estados Unidos en favor de Israel, pero lo hemos hecho con el único objetivo de poder desenmascarar públicamente a nuestro adversario", afirmó el líder palestino en un momento del discurso, en el que hizo además un llamamiento para incrementar la Intifáda "hasta la liberación de Jerusalén".

Las declaraciones de Arafat se producen tras dos días de intensos debates en el seno de la OLP y el anuncio por parte de algunas organízaciones -las prosirias Frente Democrático para la Liberación de Palestina y Frente opular para la Liberación de Palestina- de abandonar la central en desacuerdo por la forma en que se desarrolla la Conferencia de Madrid. Estos grupos se opusieron el pasado septiembre, en el Consejo Nacional Palestino celebrado en Argel a participar en la reunión.

Intento de persuasión

Por otra parte, según informa Víctor Cygielman, los sirios hicieron todo lo posible por disuadir a los palestinos de comenzar ayer las negociaciones con Israel mientras Damasco no estuviera dispuesto a hacer otro tanto.

En la noche del sábado al domingo, el ministro sirio de Exteriores, Faruk al Shara, telefoneó a Arafat a Túnez con este propósito. Sin embargo, el líder de la OLP no intervino. "Los sirios tienen su estrategia, y nosotros la nuestra", aseguró ayer un delegado palestino. "Ellos pueden permitirse esperar cien anos, si es preciso, antes de recuperar el Golán. Tienen un país independiente, un Gobierno, un ejército. Pero nosotros no tenemos nada que perder y sí mucho que ganar en esta negociación".

Cuando israelíes y palestinos abandonaban ayer la sala de discusión, en el palacio de Parcent, poco antes de mediodía, para un breve almuerzo, un periodista preguntó a uno de estos últimos: "¿Saben ustedes que los sirios no acudieron a su cita con los judíos?". La respuesta de un representante palestino fue lacónica: "Ése es su problema".