Difícil camino hacia la paz

Es obvio que las delegaciones que van a participar en la Conferencia de Paz sobre Oriente Próximo en Madrid tienen objetivos profundamente opuestos, nacidos de la amarga experiencia de las cuatro décadas pasadas. Nadie fuera de la región tiene argumentos para hacer esperar progresos rápidos o compromisos fáciles.Pero Israel y los países árabes deben ser conscientes de que el clima político internacional ha cambiado últimamente y que la comunidad internacional ( ... ) tiene derecho a esperar que lleguen a un acuerdo duradero. ( ... ) El punto de partida ha de ser las resoluciones 242 y 338 de la ONU ( ... ), basadas en el principio de paz a cambio de territorios ocupados y del reconocimiento oficial. Es absurdo que Israel insista en que cumplió estas resoluciones cuando devolvió el Sinaí a Egipto en 1979 como parte del tratado de paz (...).

El papel de EE UU, la URSS y la CE debe ser encontrar respuestas a las preocupaciones israelíes sobre los riesgos de renunciar a esos territorios. Tales riesgos entrañan la situación futura del pueblo palestino que ahora vive bajo la ocupación israelí en Gaza y Cisjordania, y cuestiones vitales como el abastecimiento de agua y las futuras relaciones económicas de la región ( ... ).

La Conferencia de Madrid debe entenderse como la mejor oportunidad que se ha tenido en muchos años de comenzar un proceso que podría conseguir la paz en Oriente Próximo

, 28 de octubre