Arquitectos catalanes proponen que Berlín siga los métodos de reforma urbana de Barcelona
Martorell-Bohigas-Mackay-Puigdomènech presenta un proyecto para la capital alemana
El estudio arquitectónico barcelonés de Josep María Martorell, Oriol Bohigas, David Mackay y Albert Puigdomènech presentará el próximo día 1 de noviembre en Berlín un proyecto para la rehabilitación de dos sectores del centro histórico de la capital alemana. La propuesta, de carácter consultivo, fue encargada a los arquitectos barceloneses por Stadt Forum, un centro de debates urbanísticos, culturales y sociales impulsado por la municipalidad berlinesa. El estudio sugiere que la ciudad reunificada siga una filosofía y métodos parecidos a los que han guiado la reforma urbana de Barcelona entre 1979 y 1991, con prioridad para el diseño de espacios públicos y recomposición del tejido urbano.
El arquitecto de origen británico e irlandés afincado en Barcelona David Mackay, asociado desde 1962 con Josep Maria Martorell y Oriol Bohigas -a quienes se ha unido recientemente como socio Albert Puigdomènech-, será quien presente el proyecto en Berlín. Mackay explicó que "el Stadt Forum [foro de ciudad] berlinés es un ámbito de debates sobre el futuro de Berlín desde todos los puntos de vista, urbanístico, sociológico, político y cultural, que fue ideado por Wolfgang Hassemer, senador berlinés de urbanismo y medio ambiente".El Stadt Fórum berlinés lleva seis meses de, funcionamiento y se ha reunido quincenalmente. Durante los debates de sus 200 miembros (entre los que figuran profesores universitarios, políticos, sociólogos, planificadores urbanos y arquitectos, como el propio Mackay) se han abordado todos los temas que afectan al futuro de la reunificada de la capital alemana.
Una de las propuestas solicitadas por Stadt Forum fue el estudio para la regeneración del centro histórico berlinés, encargado a los arquitectos barceloneses. Ni ésta ni las demás propuestas del Stadt Fórum tienen carácter vinculante para la municipalidad berlinesal sino que se someten a su consideración para su ulterior aplicación, total o parcial.
Ciudades tras el caos
"Berlín", señaló Mackay, "es una ciudad que, al igual que Barcelona a finales de los años 70, sale de una etapa de total abandono y caos y debe acometer en poco tiempo su recomposición urbana, que durante 30 años ha quedado atrás con respecto a la mayoría de las grandes ciudades europeas"."Junto con otro equipo polaco encabezado por el urbanista Peter Zlonicky, nosotros somos los únicos extranjeros que presentan propuestas", explicó Mackay, "pero no trabajamos solos, sino con un equipo de planificadores urbanos que antes trabajaban en el sector occidental y con dos arquitectos originarios de Berlín Este. Se trata de un equipo con tres mentalidades distintas. Nosotros enfocamos los liroblemas del centro de la ciudad y la planteamos definida por los espacios públicos; los planificadores se preocupan más de cuestiones como el entorno y los transportes, y los arquitectos orientales defienden los modelos del Este. Reconocen que ha habido fallos, pero están en contra del aplastamiento total de sus concepciones por parte del dinero, y de la prepotencia de la iniciativa privada". Acerca de la hipotética realización de las propuestas del equipo barcelonés, Albert Puigdomènech señaló que, de momento, "es un proyecto de ideas, pero no desde una perspectiva puramente teórica, sino que se trata de materiales urbanísticos concretos, que pueden tener aplicación o continuidad en el futuro si el Stadt Forum los acepta y el Senado berlinés los adopta como política".
En síntesis, la propuesta del estudio Martorell-Bohigas-Mackay-Puigdomènech hace hincapié en la prioridad del diseño de espacios públicos y la recomposición del discontinuo tejido urbano berlinés como elementos de identidad ciudadana y en la necesidad de que el sector público defina su modelo de ciudad antes de que la iniciativa privada imponga una dinámica urbana incontrolada.
Como principios de actuación, los arquitectos barceloneses sugieren a Berlín una aproximación metodológica y conceptual parecida a la que ha guiado la reforma urbana de Barcelona desde 1979 hasta la actualidad. "No se trata de copiar o trasplantar modelos, ni mucho menos aún de inspirarse en tal o cual actuación urbana concreta de Barcelona, sino de una actitud y un método", explicó Puigdoménech. "Nosotros creemos que son los espacios públicos los que hacen la ciudad y proponemos recomponer el tejido urbano a partir de ellos", puntualiza Mackay.
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