La fachada histórica de Mármoles Molina está despiezada como un rompecabezas

La fachada histórica de Mármoles Molina, protegida por el Plan General y derribada por una empresa textil, reposa despiezada en un almacén de Vallecas, ordenada como un rompecabezas. La empresa Día Textil, SA, que compró el solar de la calle de la Concepción Jerónima, número 20, con la obligación de respetar la portada, aseguró ayer que la repondrá en cuanto reciba una orden de la Junta de Centro. El concejal del distrito, Ángel Matanzo, comunicó verbalmente al propietario, pero no por escrito, la obligación de "montarla de nuevo piedra a piedra". Mientras, la fachada duerme en el almacén.Día Textil adquirió el antiguo taller de Mármoles Molina para instalar un almacén de venta de ropa al por mayor. La empresa, de reciente constitución, emprendió unas obras de reforma interior que en su primera fase convirtieron el viejo local en un solar. Desapareció hasta la fachada de arenisca de Novelda (Alicante), y el lugar, tapiado con una lona, se convirtió en centro de reunión de drogadictos.

Diego Bruna García, uno de los tres propietarios de Día Textil, explicó ayer que no tienen intención de eliminar la fachada. Según el arquitecto encargado de la rehabilitación, el pórtico se desmontó "pieza por pieza porque amenazaba con caerse".

El técnico asegura que "el muro de ladrillo donde se sustentaba estaba lleno de agujeros y a punto de venirse abajo". "Por eso decidí trasladar el retablo de la portada y así se lo comuniqué a varios técnicos de la Junta de Centro", concluye. El Ayuntamiento consideró que la empresa se había "extralimitado" al desmantelar la fachada y obligó a paralizar las obras. Aún continúan detenidas.

Desde el 8 de agosto, las piezas de la construcción están montadas en el suelo de un almacén del barrio de San Diego, en Vallecas.

Diego Bruna asegura que se encuentra en buen estado de conservación y lista para ser repuesta, aunque necesitaría la intervención de un cantero "que le diera algún retoque".