El Gobierno mantiene una postura abierta sobre el nuevo sistema de financiación autonómica

Felipe González se reunió anoche con el vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, y el ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, para tratar, "entre otros temas", sobre la marcha de las conversaciones para el nuevo sistema de financiación autonómica, según confirmó el Ministerio del Portavoz. El objetivo de la reunión de ayer no era cerrar la oferta del Gobierno sobre la financiación autonómica, ya que se mantiene la idea de ir con una postura abierta a las negociaciones. Por el momento, se está a la espera de que acabe la ronda de conversaciones de González con los presidentes de las comunidades.Por su parte, el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, considera que la no existencia de un nuevo modelo de financiación autonómica "no es un problema para los Presupuestos de la Generalitat para 1992" sino para los años sucesivos. Para el Gobierno catalán, hay que pactar un nuevo sistema definitivo que otorgue mayor autonomía financiera "a todas las comunidades sin buscar ningún privilegio para Cataluña".

En unas declaraciones concedidas al canal autonómico TV-3, Pujol se muestra, por primera vez, resignado a aceptar un aplazamiento en la discusión sobre la financiación autonómica hasta el próximo verano. "Supongo que habrá algunos compromisos [por parte del Gobierno] de cara a la negociación que indefectiblemente se tendrá que hacer el año que viene y cuando digo el año que viene quiero decir antes de que se hagan los Presupuestos del próximo año, o sea, antes del verano de 1992", asegura Pujol.

Pujol viene a confirmar así una oferta del Gobierno -que Solchaga le explicó en su encuentro informal del pasado domingo en Barcelona- para incrementar ampliamente los aumentos presupuestarios de las comunidades en 1992, con objeto de no negociar el nuevo sistema de financiación bajo las presiones del calendario.

Así, el Gobierno ha optado por la fórmula de incluir una importante dotación en los Presupuestos Generales del Estado de 1992, de la que unos 25.000 millones de pesetas corresponderían a Cataluña. Esta partida beneficiarla por igual a todas las comunidades autónomas, con cantidades variables en función, básicamente, de sus presupuestos de 1991.

Las fuentes de la Moncloa indicaron que no hay ninguna actitud dilatoria por parte del Gobierno ya que "hasta el 31 de diciembre hay todavía tiempo de alcanzar un acuerdo" sobre el nuevo sistema de financiación autonómica. En el caso de que éste no sea posible, añadieron, se prorrogaría el actual sistema.

Para el jueves de esta semana está en principio prevista una reunión de la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Autonómicos y, hacia la segunda quincena de octubre, se convocará el Consejo de Política Fiscal y Financiera, en la que están presentes los Ministerios de Hacienda y Administraciones Públicas y los consejeros de Hacienda de las comunidades autónomas.