El Consejo de Estado de la nueva URSS acuerda crear un espacio económico común
El Consejo de Estado, el nuevo organismo colectivo integrado por los presidentes de las repúblicas que constituían la U RSS más el líder de ésta, Mijaíl Gorbachov, aprobó ayer, "en términos generales", un acuerdo de unión para crear "un espacio económico común", según informó la agencia Interfax. El Consejo se reunió para tratar asimismo el problema de¡ abastecimiento de alimentos durante este invierno, los conflictos relacionados con las tropas fronterizas y el complejo nuclear y energético del país.
El tema del abastecimiento estuvo a cargo de Yuri Luzhov, vicepresidente del Comité de Dirección Operativa de la Economía de la URSS, que de hecho funciona como el Gobierno central. El Consejo de Estado aprobó la elaboración de un documento en el cual las repúblicas acuerdan tanto medidas de abastecimiento e intercambio de alimentos entre ellas como el reparto de la ayuda que debe llegar desde el exterior.La definición de las características del espacio económico común a crear fue y será uno de los temas centrales de debate del Consejo de Estado, El organismo debe debatir sobre el programa económico propuesto por Grigori Yavlinski, coautor del frustrado Programa de los 500 días y del proyecto de integración de la URSS en la economía mundial, elaborado con la colaboración de especialistas de la Universidad norteamericana de Harvard.
Actualmente hay tres programas sobre la mesa de los dirigentes republicanos. El de Stanislav Shatalin, el ex asesor de Gorbachov, se titula Convención para la creación de la Comunidad Económica y es el más liberal de los tres. La convención que propone Shatalin está ideada para Estados completamente independientes y no presupone una moneda común ni políticas de precios y tributarías comunes. Lo principal de esta convención, que estaría abierta también a los ex países socialistas de Europa del Este, es la creación de una unión aduanera.
El ministro de Economía de Rusia, Yevgueni Saburov, dio a conocer el segundo programa el 6 de septiembre, partiendo del hecho de que se debe conservar cierto núcleo de la antigua URSS. Las repúblicas que formen este núcleo deben conservar una moneda común y los lazos económicos existentes, amén de compartir una severa política antiinflacionaria.
El tercer programa es el primero que ha decidido discutir el Consejo de Estado, y fue elaborado por el equipo del Centro de Investigaciones Económicas y Políticas, una institución independiente que dirige el mismo Yavlinski. Este Acuerdo de unión económica es el más duro para con las repúblicas, ya que es el que conserva más rasgos de un sistema económico unitario. De acuerdo con él, se mantiene por un periodo indeterminado el Banco del Estado de la URSS (Gosbank) y hasta 1992 no se prevén modificaciones sustanciales en el sistema presupuestario.
Mientras no se da paso a la convertibilidad interna del rublo se conserva el sistema de acumulación de divisas existente; es decir, no se reparte la deuda externa y el poder central sigue respondiendo por ella. También se mantiene la importación centralizada de mercancías. El problema de la introducción de monedas nacionales se aplaza a una fecha posterior a 1992, y esta introducción se hará sólo si no perjudica al rublo.
La mayoría de los expertos soviéticos opina que estos programas son sólo enfoques teóricos y que ninguno es viable en su actual estado, por lo que serán modificados sustancialmente por las repúblicas. En realidad, las correcciones al programa formulado por Yavlinski ya están siendo introducidas.
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