_
_
_
_

Vecinos de Parla apalearon a una vaquilla en el encierro del domingo

JULIÁN MORALES, Testigos presenciales coinciden en señalar que el encierro del domingo en el pueblo de Parla fue un sangriento espectáculo. Un toro corneado por otro se desangró en el suelo, y dos vaquillas, apaleadas por el gentío, tuvieron que ser rematadas en el desolladero, "porque entre los palos y el agotamiento casi no se tenían sobre sus patas". La Asociación Nacional para la Defensa de los Animales (ANDA) ha denunciado este hecho, mientras el alcalde de Parla y las peñas taurinas del lugar desmentían ayer categóricamente esta versión.

La Asociación Nacional para la Defensa de los Animales ha presentado la denuncia contra Parla ante la Consejería de Agricultura de la Comunidad de Madrid por organizar festejos en los que se tortura a los animales. Para esta asociación hay indicios suficientes para creer que una de las vaquillas fue apaleada por en grupo de vecinos exaltados.Algunos de los mozos que participaron en el encierro del pasado domingo pudieron ver cómo una vaquilla fue sacada de la plaza para volver a hacer el recorrido.

Según ANDA, cuando la vaquilla abandonó el coso fue golpeada brutalmente hasta quedar moribunda y tener que ser sacrificada en el desolladero de la plaza. La asociación también ha consignado otro hecho truculento acaecido en ese encierro, ya que un toro se desangró en el asfalto tras haber sido herido por el asta de otra res.

Vecinos de Parla han confirmado que el choque entre los dos toros se produjo a las nueve de la mañana, cuando éstos aún no habían cubierto el recorrido.

Mentís oficial

Esta versión fue publicada ayer por el diario El Sol, lo que provocó una nota oficial emitida por el Ayuntamiento de Parla en la que se desmentía la información. En dicho comunicado, el alcalde, José Manuel Ibáñez, aprovechaba para agradecer a las peñas su actuación en los dos encierros celebrados en el municipio. Para el primer edil parleño, "gracias a ellas el resultado de los encierros en número de heridos ha sido mínimo".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Las peñas taurinas de la localidad sólo admiten el apuntillamiento del toro que fue corneado y desmienten el apaleamiento, aunque reconocen que algunos de sus miembros acabaron con otras dos vaquillas. Varios de los vecinos que asistieron al encierro del donungo confirman, sin embargo, la versión de la asociación protectora de animales y hablaban ayer de que, más que matarlas, las peñas taurinas Ias remataron, porque entre los palos y el agotamiento casi no se tenían sobre sus patas".

"Desde todos los ayuntamientos se niega siempre este tipo de hechos", dice un portavoz de la Asociación Nacional de Defensa de los Animales, "ya que la ley prohibe cualquier acto de malos tratos y ningún alcalde reconoce que en su municipio se producen hechos de este tipo".

Diversas asociaciones como ésta llevan tiempo protestando por la duración de los encierros parleños, ya que se suelen prolongar durante cerca de tres horas. Los astados cubren un recorrido de un kilómetro desde el campo de fútbol de la localidad hasta la plaza de toros, donde los mozos se divierten con las reses alrededor de dos horas.

En el encierro del domingo participaron cinco reses. Las dos supervivientes fueron sacadas en el encierro de ayer, junto con dos toros más y otras dos vaquillas.Este segundo encierro, que también duró tres horas, se desarrolló con noirmalidad, registrándose seis heridos leves, ninguno por asta de toro.

Carlos García Herrero, el joven toledano que resultó cogido de gravedad el pasado domingo, evoluciona favorablemente, aunque permanece en estado grave en el hospital Universitario de Getafé.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_