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Consecuencias económicas de los cambios de la URRS

El Este necesita con urgencia inversiones agroalimentarias

Cuatro son los sectores que se consideran claves para la, inversión occidental en el Este, según un informe de la firma británica Morgan Stanley: agroalimentación, industria de bienes de equipo, telecomunicaciones e industria farmacéutica. Lo esencial, según el documento, para, empezar la reconstrucción de unas economías devastadas.La agroalimentación es el sector más crítico para las inversiones de la empresas occidentales. Nestlé, BSN o Unilever, las firmas mejor situadas ante ese mercado, están ya preparadas para iniciar su penetración. El informe de Morgan Stanley calcula que el incremento de las ganancias por inversiones en la zona será para estas firmas de un 3% entre 1992 y 1993. Sólo a partir de 1996 o 1997 se esperan incrementos del 12% o el 14%.

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Las empresas dedicadas a bienes de equipo e ingeniería tienen mejores perspectivas de beneficios inmediatos. El documento toma como ejemplo de ello a la empresa alemana Mannesmann, la mejor colocada de todas la empresas europeas a la hora de ampliar su mercado en el Este, donde podría aumentar en un 70% sus beneficios hasta 1994. Factorías obsoletas, talleres destruidos y un paisaje industrial dantesco en algunos casos son razones de mucho peso, según Morgan, para que la demanda de estos bienes crezca vertiginosamente en los próximos cinco años.

Las telecomunicaciones son otro sector con buenas perspectivas. Fax, teléfonos, télex serán cada vez más demandados en la zona. Morgan estima que en 1991 el incremento de los beneficios para empresas como Alcatel o Erlesson por las instalación de líneas y aparatos de telecomunicaciones será de un 5%, y en 1992 llegará hasta el 14%.

Por último, unas expectativas de vida muy reducidas en el Este en comparación a Occidente o las altas cifras de mortalidad infantil hacen que las necesidades de medicinas vayan en aumento. Empresas como la sueca Gambro y la danesa Novo Nordisk preven incrementar sus ganancias en un 20% en 1991 y 1992 por sus inversiones en la Europa del Este.

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