Reclutas destinados en la base aérea de Torrejón pastorean ovejas durante su 'mili'

Soldados de la base aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid) pastorean, ordeñan y esquilan un rebaño de ovejas encerrado en el recinto militar. Según Defensa, los soldados sólo colaboran esporádicamente con un pastor en el cuidado del ganado, cuya misión es comer el pasto de las orillas de las pistas para impedir la presencia de pájaros. El secretario de Estado de Administración Militar, Gustavo Suárez Pertierra, aseguró en 1990 en el Senado que "las granjas de ganadería no están autorizadas en el Ministerio de Defensa".Varios ex soldados que han realizado el servicio militar en la base aérea de Torrejón de Ardoz han asegurado a este periódico que, al menos tres reclutas de cada reemplazo tienen como tarea exclusiva el cuidado del citado rebaño que, según afirman, cuenta con unas 600 ovejas merinas.

"Se pasan el día ordeñando y limpiando, viven totalmente aparte y no participan en los ejercicios de adiestramiento", relata uno de estos jóvenes. Según el testimonio de estos antiguos soldados, estos reclutas duermen en unas literas que han sido instaladas en la nave donde se guarda durante la noche a las ovejas y que se encuentra situada muy cerca de la cabecera de pista de la base.

Los soldados ya licenciados afirman que se trata "de una explotación ganadera ya que, incluso acuden particulares a la base a comprar ovejas". Según estos jóvenes, el rebaño es propiedad del teniente coronel Pontizas, jefe del grupo de personal de la base de Torrejón de Ardoz, aunque "quien lleva directamente el tema de la granja es el teniente Germán, encargado de la cantina". Este periódico intentó ayer, sin éxito, contrastar la información con estos dos oficiales.

Según un portavoz oficial del Ministerio de Defensa, el rebaño de ovejas, cuyo número de cabezas no pudo precisar, es propiedad del Ejército del Aire, y el teniente coronel Pontizas se limita "entre sus otras funciones, a administrar el funcionamiento del establo". "El teniente Germán se limita", precisó el portavoz de Defensa, "a supervisar el trabajo del pastor".

El representante de Defensa aseguró que el cuidado del ganado lo realiza un pastor profesional contratado por la base y negó rotundamente que se destine a reclutas a la atención del ganado. "Lo único que se hace es enviar a soldados de la Unidad de Destino a ayudar al pastor cuando, ocasionalmente, pide ayuda en su trabajo", dijo.

Misión especial

Según el portavoz de Defensa, el rebaño tiene una misión específica muy especial: "Las ovejas se comen el pasto de los alrededores de las pistas y, así, evitan que haya pájaros que se pueden introducir en las turbinas de los aviones y provocar accidentes", señaló.El portavoz negó que el rebaño suponga beneficios económicos para ningún miembro del personal de la base aérea. "El rendimiento económico del ganado está perfectamente fiscalizado por el ministerio y revierte en la propia base de Torrejón", manifestó.

Esta persona negó rotundamente que se vendan ovejas a los particulares. "Lo que sí se hace es vender la lana cuando se esquilan los animales, pero esta venta y los ingresos subsiguientes quedan perfectamente reflejados en los libros de contabilidad de la base", dijo.

El secretario de Estado de Administración Militar, Gustavo Suárez Pertierra, manifestó en una respuesta parlamentaria a un senador de Izquierda Unida (IU) en la Comisión de Defensa del Senado, en mayo de 1990, que "las granjas de ganadería no están autorizadas en el Ministerio de Defensa".

"Únicamente están autorizadas algunas granjas de carácter puramente agrícola en las yeguadas militares [ ... ] pero no hay granjas de ganadería, de animales, en el ámbito del Departamento", contestó el secretario de Estado al senador de IU que formuló la demanda.